Iván Rodríguez alienta a sus jugadoras, entre ellas la sanluqueña Isabel del Moral (i). :: ÓSCAR CHAMORRO
Deportes/Baloncesto

Alegría y decepción, todo al mismo tiempo

Es la primera vez en los seis años que lleva el Nacional de minibasket visitando San Fernando en que las chicas se quedan sin medalla Andalucía marcha imparable en su camino hacia el oro; no así las féminas, que buscarán ser quintas

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No siempre se puede sonreir. Era ya una constante cada año por Semana Santa ver a las selecciones andaluzas de minibasket subidas en el podio. En 2010 será la primera vez, desde que este prestigioso Campeonato de España de Selecciones Autonómicas abandonó Blanes para venir a San Fernando hace seis años, en que esta imagen no vaya a reproducirse.

Pero no es ningún drama. Andalucía lucía ayer dos caras opuestas. La buena la de los chicos, con la sonrisa dibujada en su rostro. Porque además de tener tiempo para saborear su clasificación para las semifinales, ayer todos disfrutaron de sus minutos y se dieron el 'homenaje' ante una pobre Castilla La Mancha, que no le duró ni medio partido a los del debutante Raúl Fernández. Antes del descanso ya cerraban acta con un marcador que lo decía todo (57-7), gracias a la acertada normativa impuesta por la Federación Española que evita que se produzcan así humillaciones desorbitantes y demasiado sangrantes para la moral a esas edades.

Poca historia para calentar motores de cara a los dos días en los que se va a decidir el campeonato. De nuevo un sobresaliente para los tres representantes gaditanos, muy enchufados a pesar del escaso interés que suscitaba la contienda.

Ahora toca 'merendarse' también a los vascos, aunque éstos venden muy cara su piel. La segunda de las semifinales se jugará a partir de las 19.30 horas. Antes ya sabrán los andaluces si vuelve a ser Cataluña con quien se tendrán que jugar los cuartos mañana o si, por el contrario, Islas Baleares sigue sorprendiendo y amansa a la fiera con su potencial ofensivo y su buen hacer en defensa que les ha llevado tan lejos.

Eso, claro, dando por supuesto que conseguirán la victoria ante País Vasco, una selección que ya ayer perdió contra Cataluña (48-43) y cuyo potencial se basa únicamente en un buen ajuste defensivo, lo que contrasta con la soltura anotadora de los anfitriones, uno de los más acertados del torneo de cara a canasta.

Valencia fue demasiado

La desilusión llegó a primera hora, cuando se certificaba la derrota de las chicas ante Valencia (61-50). Demasiados desajustes terminaron por truncar el sueño de las de Iván Rodríguez. Al menos, el ajustado triunfo vespertino ante País Vasco (68-62) permitirá a las andaluzas desquitarse hoy y luchar con Castilla y León (15.30 horas) por el quinto puesto.