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Los proyectos turísticos de la Sierra, parados por la falta de liquidez de los ayuntamientos
Museos, centros de interpretación y promociones cuentan con la financiación de la Junta pero no reciben la parte de los Consistorios
ARCOS. Actualizado: GuardarLa Sierra de Cádiz lleva años tratando de subirse al tren del desarrollo turístico pero la alta velocidad se le resiste. Largo es el camino que se ha andado desde que los pueblos de la comarca vivían exclusivamente de la agricultura y la ganadería pero también es amplio el camino a recorrer para que los Pueblos Blancos se consoliden como uno de los principales espacios de turismo interior de la comunidad autónoma.
Al margen de la necesidad de mejorar las comunicaciones, algo que es fundamental para el turismo, los pueblos basan sus estrategias en dotarse de contenido histórico-cultural para que los visitantes no sólo puedan disfrutar con la belleza natural de la zona. En esa línea, se presentó en octubre de 2007 un completo proyecto que pretendía colocar a la comarca en el disparadero del turismo nacional. El mismo, incluido dentro de las Iniciativas de Turismo Sostenible (ITS), levantó una gran expectación entre los municipios que vieron en él una posibilidad de sacar adelante los proyectos que no terminaban de ver la luz por falta de recursos. Cuando el entonces consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Sergio Moreno, presentó en Arcos la iniciativa se habló de 9,5 millones de euros de inversión de los que la Junta de Andalucía iba a aportar el 60%. El proyecto pretendía mejorar la difusión y promoción de la comarca como destino turístico, la consolidación de la marca Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz, la potenciación de la unidad y la identidad territorial y la valoración de los recursos turísticos, entre otros aspectos.
Planes estancados
Las primeras iniciativas que se iban a poner en marcha y que pertenecían al primero de los cuatro planes de acción que contempla el proyecto incluían la creación del Centro de Interpretación Ciudad de Arcos, la mejora del acceso al Centro Cultural de Caños Santos de Alcalá del Valle, la creación del Centro de Iniciativas Turísticas de Prado del Rey y la panelización y creación del Museo Histórico Turístico Cultural de Benamahoma (Grazalema). Unos proyectos que no han llegado a ver la luz dos años y medio después de la presentación sobre papel. Además, también se contempló la implantación de certificados de calidad para establecimientos hoteleros y hosteleros, la elaboración de un inventario de recursos y un plan de promoción y difusión, así como la creación de un portal informático para la promoción de la comarca. Iniciativas que tampoco han llegado a materializarse.
El museo de Arcos se encuentra pendiente de la dotación del contenido para abrir sus puertas y el Centro de Iniciativas Turísticas de Prado aún no se ha construido. La panelización de Grazalema está a punto de adjudicarse y el proyecto del museo histórico se encuentra pendiente de adjudicación. Por último, el acceso al Centro Cultural de Caños Santos tampoco se ha ejecutado y se encuentra pendiente de que la iniciativa privada pueda aportar los 120.000 euros que corresponden al Ayuntamiento, del total de los 300.000 que se invertirán en la iniciativa.
El problema que ha impedido que se desarrollen estos proyectos, según el delegado provincial de Turismo, José María Reguera, ha sido el de «la cofinanciación municipal». El proyecto contemplaba que los ayuntamientos, a través de la Mancomunidad de la Sierra, tenían que afrontar el 40% de las inversiones algo que para todos resulta complicado, dada la situación económica que tienen todos los consistorios. «Para evitar esta situación, en planes de acciones posteriores, hemos tenido que buscar el apoyo del Instituto de Empleo y Desarrollo Tecnológico de Diputación», destacó Reguera. No obstante, los primeros proyectos se han quedado estancados pendientes de que los consistorios consigan esa financiación.
Con le intervención de otras administraciones, como la Diputación, los planes de acciones posteriores sí que han conseguido que algunas iniciativas se materialicen. Ese es el caso, por ejemplo, de la creación de alojamientos en la Vía Verde de la Sierra que se inauguró hace unos meses o el Centro de Interpretación Turístico de la Flora y la Fauna del Parque Natural de Grazalema que se pretende construir en una antigua escuela rural que se ubica en la zona del Puerto del Alamillo, aunque este último, de momento, no se ha ejecutado.
Las ITS de la Sierra fueron pioneras en la puesta en marcha de la Estrategia Andaluza de Turismo Sostenible que pretendía poner en marcha, en quince zonas diferenciadas, actuaciones por valor de 140 millones de euros.