Los andamiajes de la Iglesia Mayor deslucen una de las salidas más tradicionales, la de Columna, que nada más abandonar su templo se dirigió a la Carrera Oficial. :: C. C.
Jerez

El inicio de una semana histórica

La Borriquita abre los cortejos en un Domingo de Ramos con miles de isleños en la calle

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Al fin llegó. La salida más esperada de los últimos años. Aquella que da inicio a la Semana Santa del Bicentenario. A las cuatro en punto de la tarde la Cruz de Guía de La Borriquita salía de la Capilla de Nuestra Señora de la Estrella para enfilar una calle Real abarrotada de isleños que no dudaron en dar un caluroso aplauso al divisar el paso de misterio. El tiempo acompañó e invitó a disfrutar de las tradiciones de un Domingo de Ramos especial y en el que los cofrades ya miraban de reojo los preparativos para la procesión Magna del Sábado Santo.

Varias novedades presentaba la Hermandad de Cristo Rey para esta salida procesional. En primer lugar

los nuevos ropajes confeccionados para las imágenes secundarias del paso de misterio, aunque destacaba también el cambio de los codales de los hermanos por cirios. Como es habitual cientos de personas siguieron el paso, si bien hay dos puntos especiales, su salida y su paso por las Siete Revueltas.

Una procesión que destaca por su iconografía. En el primer paso se representa la entrada triunfal de Jesucristo en la ciudad de Jerusalén. La escena la componen San Juan Evangelista, San Andrés, San Pedro que tira de una pollina sobre la que va Jesús, un anciano, una mujer hebrea con un bebe en brazos y un niño. El segundo es una dolorosa bajo palio si bien como curiosidad hay que resaltar que existe una calle dedicada a la Virgen, denominada Pasaje Virgen de la Estrella.

De la Ardila

Humildad y Paciencia es la que tiene el itinerario más largo del Domingo de Ramos, ya que debe llegar desde La Ardila al centro. Por ello, suele ser un cortejo que va bastante deprisa al menos hasta llegar a la Alameda en el que su paso convivió con las saetas y por ello se exhibió en la segunda parte del recorrido. Curiosa es su imaginería ya que en el primer paso se representa una alegoría, Cristo sentado sobre una peña esperando su crucifixión. El segundo una Dolorosa bajo uno de los palios más llamativos al estar acompañada de San Juan, que aparece a la Izquierda de la imagen, y María Magdalena, la cual se sitúa a la derecha, representando las tres figuras más simbólicas en el momento de la Crucifixión.

En el cortejo uno de los momentos más cofrades se produjo en la despedida de la hermandad del centro de La Isla, en el callejón Manuel de Arriaga, junto a la Compañía de María, para volver a su barrio.

La última en procesionar ayer fue Columna que tuvo en su recogida uno de los puntos más álgidos del Domingo de Ramos. Entre sus estrenos estaba un nuevo ceñidor para la Virgen, María Santísima de Las Lágrimas, bordado en hilo de oro sobre malla. Tras su salida de la Carrera Oficial, la concentración de personas en el centro era multitudinaria ya que los tres pasos coincidían en pocos metros desde Héroes del Baleares hasta Cecilio Pujazón.

Los andamiajes de la Iglesia Mayor deslucieron la salida de un cortejo en el que curiosamente su Virgen fue la primera en la Semana Santa isleña en salir bajo palio. Además también hubo una propuesta para que la Virgen de las Lágrimas tuviera su propia calle, aunque en esta ocasión fue rechazada en pleno.

Como siempre la emoción se concentró en su regreso y especialmente a partir de la calle Nicolás Carrillo hasta que llegó a su templo.