«Eran unos flojos que se desmayaban durante la instrucción»

«Eran uno flojos, que a menudo se desmayaban mientras hacían la instrucción». La frase es de 'César', uno de los 'desmovilizados' de las FARC colombianas que colabora con la Comisaría General de Información, y se refiere a los miembros de ETA que se trasladaron a los campamentos en la selva de Venezuela.

El ex guerrillero, como el resto de los arrepentidos que convivieron con el grupo de etarras en la jungla, descubrió los continuos problemas de salud de los 'instructores' europeos en un entorno tan hostil como aquel, máxime cuando muchos de ellos eran «continuos fumadores». En 2006, 'César' compartió varios días con Carlos (José María Zaldúa Korta, 'Aitona'), hasta que éste, que en la actualidad tiene 60 años, «al mes de llegar tuvo que abandonar el campamento debido a su mal estado de salud».

Los confidentes afirmaron que para los etarras era una verdadera tortura participar en las dos horas de actividad deportiva con las que se empezaba el día en los campamentos guerrilleros. Aunque casi más tortura eran los mosquitos y sus picaduras, que obligaba a los guerrilleros a continuos viajes a los poblados cercanos a comprar repelente para sus huéspedes terroristas.

Un tercer 'desmovilizado', 'Camilo', narró a la Policía española las vicisitudes de Iñaki Domínguez Atxalandabaso cuando en verano de 2007 acudió a la selva para dar un curso de explosivos. «Recibió muchas picaduras de insectos y 'Pizarro' (el jefe del campamento de las FARC) tuvo que encargar a alguien que fuese a comprarle repelente. Además (Atxalandabaso) estuvo dos días con diarrea e, igual que antes, hubo que ir a comprar medicamentos para él».

Al ex guerrillero 'Camilo' se le quedó grabado el exabrupto, para él desconocido, que una y otra vez Domínguez soltaba para lamentarse de su lamentable estado gástrico: «¡Joder!»