La UE se reinventa tras rescatar a Grecia
El salvamento del país heleno aboca al Eurogrupo a un refuerzo de la vigilancia multilateral con nuevos conceptos como la competitividad La inclusión del FMI en el mecanismo de apoyo deja un sabor amargo en los miembros de la Eurozona
Actualizado: GuardarUn sentimiento agridulce embargaba ayer los espíritus del Consejo europeo, satisfecho de haber sacado adelante una fórmula útil para apagar el incendio griego pero incómodo -y a lo que parece, por mucho tiempo- porque una institución ajena a la Unión Económica y Monetaria (UEM), el FMI, haya sido convocada a intervenir en un país miembro de la moneda común, aunque sólo si las circunstancias hicieran necesario su concurso, dictando instrucciones para su recuperación como si de una economía en vías de desarrollo se tratara.
La percepción de que las urgencias griegas pasaban a segundo término, como los mercados parecían corroborar ya por la tarde, corría emparejada con la certidumbre de que Europa está entrando en una nueva fase de reformas mayores, organizativas y presupuestarias, una vez concluidas las institucionales con el Tratado de Lisboa. Al aceptar la cumbre las grandes líneas de la Estrategia UE2020 para la modernización de la economía comunitaria, y encargar una reconsideración de los mecanismos de vigilancia presupuestaria y actuación en el seno de la UEM, los líderes europeos pusieron ayer en marcha una operación de gran calado cuyas consecuencias se harán sentir incluso en las futuras reformulaciones presupuestarias plurianuales. La próxima está prevista para 2014.
Angela Merkel había condicionado su apoyo al plan de rescate de Grecia al refuerzo de los mecanismos de vigilancia multilateral de la UE y la cumbre, ayer, hacía suyas estas demandas al reclamar de la Comisión propuestas para «fortalecer la coordinación de la zona del euro» antes de junio de 2010. La competitividad, clave en la crisis griega pero factor también de desequilibrio en la Eurozona, como consecuencia del diferencial a su favor acumulado por Alemania, va a ser objeto de consideración en modo todavía por definir. En realidad, se da un debate entre los economistas sobre la manera de medir ese concepto y ayer, Zapatero lo señalaba al recordar que una variable que debería ser utilizada para medir la competitividad, como es la cuota de mercado, no es desfavorable para España.
Otras variables más directamente vinculadas al concepto, como los costos de producción, son netamente favorables a Alemania, que ha aplicado una política de contención salarial durante la última década para potenciar sus capacidades exportadoras. En la década de 1998 a 2008, los salarios en España crecieron un 50% contra un 25% en Alemania, mientras la productividad ha aumentado la mitad (el 7%) que en la República Federal (el 15%) durante el periodo de referencia.
De aquí a junio, cuando la cumbre volverá a tratar el tema, tendrá que definirse la manera de medir la competitividad en la UE y las actuaciones a seguir ante los países que desoígan las reconvenciones que puedan formularles la Comisión, el Comité Económico y Financiero o el Ecofin. Cualquier modificación en el mecanismo de sanciones contemplado en el Pacto de Estabilidad requeriría una reforma del Tratado, sin duda problemática, a la que la cumbre no hacía alusiones.
La pérdida de competitividad de la economía española ha sido señalada sistemáticamente por la Comisión y otras instancias internacionales. Los sucesivos gobiernos en el poder, sin embargo, han consentido incrementos en los costos salariales españoles muy por encima de la media europea.
La nueva estrategia de crecimiento económico, que constituye el marco global de actuaciones para la UE durante la década en curso, se concentrará en cinco grandes objetivos: acrecentar la tasa de empleo hasta el 75% de la población activa, aumentar el número de titulados superiores, situar en el 3% del PIB las inversiones en I+D, reducir el número de pobres y proseguir la lucha por la reducción de emisiones contaminantes y el uso de energías alternativas. La cumbre europea de junio definirá las estrategias concernientes a cada uno de estos ejes.