«Espero que no nos deje con el culo al aire»

El ex presidente balear Jaume Matas declarará hoy como imputado ante el juez del 'caso Palma Arena'. El ex líder del PP de Baleares y ex ministro de Medio Ambiente solicitó ayer el aplazamiento de su comparecencia ante las nuevas pruebas aportadas al sumario que investiga el sobrecoste en la construcción del velódromo Palma Arena durante la anterior legislatura, cuando Matas era presidente autonómico, así como el incremento presuntamente irregular del patrimonio de éste y la supuesta financiación ilegal de su partido.

Las nuevas pruebas, que consisten en unas grabaciones telefónicas, fueron aportadas ayer por Fernando Areal, cuñado de Matas, que compareció ante el juez José Castro. Dado que las grabaciones no estaban en el sumario el abogado de Matas y de los Areal, Rafael Perera, solicitó la suspensión de las declaraciones del resto de imputados citados para poder analizarlas. De esta manera, Matas, su mujer, Maite Areal, y el supuesto testaferro del primero, Bartomeu Reus, están citados hoy a las 9.00 horas.

Los abogados mostraron su preocupación por estos pinchazos telefónicos, que, presuntamente, se realizaron en diciembre de 2009, ya que podrían contener conversaciones entre los letrados y sus defendidos. Según fuentes jurídicas, en una de las grabaciones, Areal afirmaba que esperaba que Reus no le dejara «con el culo al aire» respecto a la compra de un piso en el barrio de Salamanca de Madrid, adquirido por Reus pero del que se sospecha que Matas es el verdadero propietario.

Durante su declaración, Areal reconoció que actuó como apoderado de su cuñado en el contrato por el que Matas alquiló el piso escriturado a nombre de Reus, y que lo hizo para no perjudicar al ex presidente balear de cara a las elecciones. Antes de que se conocieran estas conversaciones, Areal reconoció haber pagado 32.000 euros en dinero negro en la sede del PP al constructor que realizó las obras del 'palacete' que Matas compró en Palma.

Según dijo, fue su hermana la que le entregó el dinero para que se lo diera a este constructor, que en su día hizo las obras de renovación de la sede de los populares en Palma. El cuñado de Matas negó haber pagado 70.000 euros en negro a la agencia de comunicación Nimbus para financiar la campaña del PP en las últimas elecciones. Tras cerca de cuatro horas de interrogatorio, Arenal se acogió a su derecho de no declarar y el juez no le impuso ningún tipo de medida cautelar.