El juego del no en positivo
La muestra, obra del malagueño Marcel Bohumil, sirve para poner en duda el mercado del arte a través de múltiples expresiones La Neilson Gallery de Grazalema acoge la exposición 'Otsumuru'
CÁDIZ. Actualizado: Guardar'Otsumuru' es una palabra japonesa que alude a un final que es en realidad un principio. No es un trabalenguas, ni un juego de ingenio. Es la forma que tiene el artista malagueño Marcel Bohumil (1976) de defender el no como una posibilidad positiva. Lo está explicando estos días en la Neilson Gallery, en Grazalema, en una exposición que explora el no lugar, el no estilo, la no representación o la no filiación.
Como él mismo destaca, «en un discurso que no tiene procedencia», la muestra sirve para poner en duda el mercado del arte a través del uso de múltiples referencias estilísticas e idiográficas, en forma de collage, dibujo o escultura, donde se casan conceptos tradicionales y contemporáneos y se descubren nuevos significados en contextos paralelos.
Tres de los espacios de la Neilson Gallery han sido utilizados para articular este no discurso. El primero es el no lugar, imágenes desubicadas, esculturas y collages de pinturas y dibujos de diferentes formatos. También una pintura formada por el deshielo de cubitos y elaborada el mismo día de la inauguración de la muestra. El segundo espacio está lleno de mosaicos carente de figuración narrativa. Y el tercero está copado por una videoexposición de una hora que recoge en una secuencia el trayecto que va de la estación de Tokio hasta la vuelta a la estación.
Marcel Bohumil es licenciado en Bellas Artes y tiene estudios, además, de Arte Dramático y Diseño Gráfico. Ha obtenido varios premios en el certamen Malagacrea y para este 2010 tiene cerradas varias exposiciones, tanto a nivel individual como colectiva. 'Otsomuru', en la Neilson Gallery, hasta el 17 de abril.