EN RESUMEN

El toro, el motivo fundamental de la decoración

Rafael Lara recogió el testigo de su padre, Luis el de Pacote, que cuando apenas tenía los 30 se hizo con las riendas del bar tras morir su fundador, Antonio Roldán, que lo abrió en la década de los 50. Roldán era un gran aficionado a los toros, por lo que decoró su establecimiento con fotografías de sus diestros predilectos. Muchos de ellos fueron clientes habituales durante décadas. Lo que no ha cambiado en todo este tiempo es la carta. Seis tapas se pueden degustar en este local situado en el Paseo de las Delicias: menudo, mollejas, carne en salsa, carne en tomate, riñones al Jerez y costillitas en adobo. La cola de toro es la gran estrella. No se sirve en tapas, sino en un plato con tres buenos trozos de cola toro y su fritá de papas. Sólo con esta oferta, El Volapié es uno de los imprescindibles de la provincia.