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El lastre para Jerez de una deuda municipal que no sólo es heredada
El ejecutivo insiste en que los casi 700 millones que se deben son fruto del pasado, y el PP denuncia que han crecido en el caso de las concesionarias
JEREZ. Actualizado: GuardarLa losa de los casi 700 millones de euros que debe el Ayuntamiento de Jerez pesa cada vez más sobre las espaldas de esta institución pública que, además, no logra contener su gasto anual pese a que no hace más que plantear severos planes de choque que no acaban de prosperar y cuyas principales medidas, como el fallido Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), se entierran antes de hayan podido nacer.
Ésta es la tesitura a la que tiene que hacer frente el ejecutivo liderado por Pilar Sánchez, que lidia con unas arcas municipales esquilmadas, con los 2.700 trabajadores municipales con las carnes abiertas por la falta de liquidez, con las plantillas de las concesionarias protagonizando protestas en la calle y con unos ingresos que son mucho menores que en años precedentes (los fondos que entraban a través de Urbanismo son cosa del pasado) pese a que los gastos se mantienen. Es lo mismo que les ocurre a muchas empresas que en estos años de crisis han visto como caían sus beneficios, tal como argumentó hace unos días la primera edil.
Sin ir más lejos, la liquidación presupuestaria del último ejercicio cerrado, la de 2008, puso de manifiesto ese exceso de gasto respecto a los ingresos y dio un saldo negativo de 40,3 millones de euros. No es ninguna sorpresa, puesto que el déficit anual de las cuentas municipales suelen rondar esos 30 millones de euros.
Por ese motivo, el plan de saneamiento aprobado en julio para el Ayuntamiento estableció que este año había que reducir en unos 16 millones de euros los gastos, sobre todo metiendo la tijera en el capítulo de personal y en el corriente. Así, el primero debe reducirse de 91 a 84 millones, lo que supone que el mes se siguen empleando seis millones de euros para abonar las nóminas; mientras que en el segundo aspecto también se reducen unos siete millones. En total, el límite de gasto total fijado es de 200 millones de euros.
Lo malo es que apenas se han aplicado hasta ahora algunas medidas de ahorro contundentes -sólo la rebaja de los sueldos del gobierno y los altos cargos-, por lo que el Consistorio tiene verdaderos problemas de tesorería.
A esa ruina contable se le suma la asfixia económica de la enorme deuda, que en el caso del Ayuntamiento matriz supone unos 573 millones (entre la que es a corto plazo y la a largo plazo), a los que hay que sumar los alrededor de 100 de las empresas municipales, un montante negativo que encabeza en particular Aguas de Jerez (Ajemsa), que en solitario ya acumula alrededor de 97 millones de deuda.
Sólo a los bancos, que accedieron a pagar a los acreedores y que luego el Ayuntamiento les fuera abonando poco a poco, se le deben 130 millones de euros. Pero también hay que sumar todo lo que se adeuda a las empresas concesionarias, una cantidad «heredada y acumulada en casi dos décadas de impagos», según ha repetido hasta la saciedad el ejecutivo local.
Sin embargo, ayer mismo la presidenta del PP y candidata a la Alcaldía, María José García-Pelayo, desmentía esta afirmación y apuntaba que si bien los anteriores gobiernos dejaron mucho a deber, los actuales dirigentes siguen haciendo crecer la cifra, sobre todo en el caso de las empresas concesionarias de los servicios públicos.
En concreto, García-Pelayo denunciaba ayer que pese a lo que dice el PSOE de que «sí se está pagando el corriente», a Teconma (parques y jardines) se le debe un 600% más que en 2005, ya que ahora se le adeudan 18 millones y entonces eran sólo 2,8. Lo mismo ocurre con Cojetusa, que reclama ya 24 millones, el doble de los 12 de hace cinco años; o a Urbaser, que de 23 millones de deuda ha pasado a acumular 30. «Jerez está al borde del colapso», sentenció la popular.