El Consistorio, acusado de «comprar» a CGT

A pesar de tratarse del sindicato mayoritario del comité de empresa municipal, CGT se ha quedado completamente solo. Ayer, el resto de las fuerzas representantes de los trabajadores (CC OO, UGT y CTP), sin incluir al sindicato policial, salieron a la palestra para explicar por qué se han terminado de romper las negociaciones del Expediente Temporal de Regulación de Empleo.

Aunque apuntaron varios factores, como la falta de concreción del Plan de Viabilidad, la deficiente gestión del expediente por parte del Ayuntamiento o el silencio total de la Junta de Andalucía, hubo un punto que centró por completo su intervención: en la última Junta de Gobierno Local se aprobó una resolución sobre complementos de productividad que beneficia a siete trabajadores del Consistorio.

Un argumento que ya explicaría de por sí el enfado sindical, pues si se trata de recortar gastos no parece lógico que se aumenten las percepciones de algunos empleados, con lo que además se incumple el mecanismo del catálogo de puestos de trabajo tan demandado. Sin embargo, lo más llamativo de todo es que, según las tres organizaciones, de los siete beneficiados cinco son delegados de CGT, con lo que interpretan que la Administración local «les ha pagado por su silencio».

Como explicaron, ciertos sindicatos como el antes mencionados o el SIP, de la Policía Local, se caracterizan por «dar la lata» a la alcaldesa y se han vuelto incómodos, por lo que «bajo cuerda les hacen determinadas concesiones, porque si no la lían». Fuentes de solvencia dentro del gobierno han confirmado a LA VOZ este punto, aunque aún cabe esperar la reacción de los responsables de CGT, que han preferido aguardar al día de hoy para pronunciarse.

A partir de este momento, como sentenciaron desde las organizaciones, las tres se han puesto a disposición del Ayuntamiento para seguir negociando lo concerniente al Plan de Viabilidad, pero en lo que se refiere al ERTE, que según su punto de vista ha nacido con mal pie, para ellos «ya está muerto y enterrado».