Atlético y Valencia están a expensas del gol para seguir vivos en Europa
MADRID. Actualizado: GuardarYa es el único equipo del fútbol español que se mantiene en las tres competiciones, pero el Atlético está a expensas del gol para continuar en Europa. También el Valencia necesita al menos un tanto para no despedirse del segundo torneo continental que hoy podría quedarse sin representación española. Tras el 0-0 del Calderón, el 'Atleti' necesita como mínimo un empate con goles en Lisboa frente al Sporting (21.00 h. Telecinco), y después del 1-1 de Mestalla, el Valencia está obligado a un reto superior: lograr al menos dos tantos o derrotar al Werder Bremen en Alemania (19.00 h. Canal Plus).
En Portugal se despidió el Atlético la pasada temporada de la Liga de Campeones, frente al Oporto, y se juega en el mismo país el pase a los cuartos de final de la Liga Europa. Quique Flores alineará su mejor once contra el Sporting, mientras que los lusos no podrán contar con los expulsados de la ida, Grimi y Tonel. En el Calderón el Atlético fue incapaz de marcar frente a diez y también en la recta final contra a nueve, pero los rojiblancos se desenvuelven mejor fuera de casa, con menos presión que en su estadio, y deben aprovechar su velocidad para intentar sentenciar al Sporting y salvar parte del orgullo español en la capital portuguesa.
La otra porción está en manos del Valencia, que la pasada campaña sufrió un duro golpe al ser despedido de la UEFA en dieciseisavos, por el Dinamo de Kiev, y ahora está muy amenazado por un poderoso Werder Bremen que marcó en Mestalla y no conoce la derrota en su terreno en Europa esta temporada. Además, aunque el Valencia recupera a Villa, estará muy mermado, con la baja de siete jugadores, entre ellos, el lesionado Albelda y los sancionados Banega y Pablo Hernández.
Por si fueran poco los inconvenientes, Alemania no se le da nada bien al Valencia, aunque esta vez el Werder tendrá también ausencias destacadas, como las de Frings y Ozil, y Pizarro está tocado. Unai Emery ha centrado sus esperanzas en la eficacia ofensiva de Silva y Villa. El resultado no permite conservadurismo.