La gran empresa familiar, contra el abaratamiento del despido

«Si durante los dos últimos años se hubiera abaratado el despido, no se hubiera mantenido un solo empleo». Así de categórico se mostró ayer Simón Pedro Barceló, presidente del Instituto de Empresa Familiar (IEF), quien junto a esta crítica a la que ha sido bandera de la CEOE en los últimos tiempos, cargó también de forma muy dura contra «toda» la clase política española. «Mientras ciudadanos y empresas hacemos sacrificios, los partidos no están a la altura de las circunstancias», sentenció ante la imposibilidad de cerrar un pacto de Estado contra la crisis.

El responsable del IEF defendió la reducción de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social. «Nunca sabremos cuánto empleo se hubiera salvado si el Gobierno, como estuvo a punto el año pasado, las hubiera reducido en un punto y medio, como pretendía», apuntó desilusionado. «Si pensaban que era una buena idea, lo tenían que haber hecho, les habría salido más a cuenta», añadió.

Barceló, que participaba en un encuentro organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie), reclamó también la ampliación de la edad de jubilación hasta los 70 años en función de la actividad.

Sobre las pensiones, Barceló sugirió la creación de un sistema mixto de ahorro, a través del cual los trabajadores podrían destinar voluntariamente a una 'cuenta personal' gestionada por el Gobierno tres puntos más de cotización con la que complementar en el futuro la pensión pública o privada.

Y en su condición de presidente de Hoteles Barceló, el ejecutivo criticó de forma abierta la subida del IVA que, afirmó, «será demoledora para el turismo». La medida, dijo, recortará un 15% los resultados de las empresas del sector.