El cantaor chiclanero estará esta noche en Los Apóstoles. :: A. V.
Jerez

Por la «verdad» del flamenco

Rancapino demostró ayer la misma naturalidad que pide para el cante

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Aunque estaba en la bodega a su hora, tuvieron que buscarlo para que se sentara a la mesa, le sonó el teléfono móvil varias veces mientras hablaba y se arrancó con unos segunditos de entonación cuando se lo pidió el cuerpo, en medio de una frase. Su espontaneidad arrancó más de una sonrisa entre el público y entre los artistas que lo acompañaban en la presentación de ayer. «Desvirtuar un cante de Fernando Terremoto es un insulto al flamenco. A mí no me llegan los cantes modernos. Los jóvenes deben escuchar y estudiar a los clásicos porque la verdad del flamenco y su naturalidad no se pueden perder», pidió Alonso Núñez, Rancapino, durante su intervención.

El chiclanero tuvo tiempo de hablar de su recital de hoy, de su compañero Antonio Reyes y de sus historias con Camarón cuando se ganaba la vida en la Venta de Vargas. «He venido muchas veces a cantar a Jerez. A los 14 años ya iba a las casetas de la Feria a cantarle a los señoritos», dijo recordando tiempos pasados, aunque no tan lejanos.

A pesar de que tiene anunciadas soleás, malagueñas, alegrías y bulerías, Rancapino se puso serio para decir: «Juro por mi madre que cuando voy a cantar no sé por dónde voy a empezar. Lo bonito es divertirse, pasarlo bien».

Recuerdos

«A la Venta de Vargas íbamos todos los que intentábamos ganarnos la vida en este arte: Juan Farina, Capinete, Chato de la Isla... Yo vivía en Chiclana y Camarón iba a buscarme a mi casa», recordó Rancapino sobre su amistado con el cantaor desaparecido prematuramente. «Se quedaba conmigo hasta las 11 de la noche, que salía el 'canario' de vuelta para San Fernando», continuó. La conocida María, regente de la venta isleña, le pedía a Rancapino que no llevara más al joven Camarón «porque era un niño y temía que le cerraran la venta. Pero cuando lo escuchaba cantar se le olvidaba: era un caramelo, una caja de música», describió.