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Hipotecas raquíticas en el peor año de la crisis

Las contrataciones volvieron a caer en 2009 y la cuantía apenas supera los 100.000 eurosLos bancos mantuvieron mano dura en la concesión de préstamos, que apenas cubren el 70% de la inversión de la vivienda

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Sin letra pequeña, el banco ha esquivado cualquier proyecto de hipoteca que no tenga un futuro garantizado. En vista del dato de diciembre que cierra el ejercicio, sólo los grandes ahorradores han encontrado apoyo en su sucursal. Y tan grandes ahorradores, ya que la cantidad prestada apenas alcanza para el 70% de la inversión.

El importe medio durante el año negro de la crisis ha sido de 109.238 euros, un 17% menos de lo que se concedía en 2008 y uno de los mayores recortes de los últimos cinco años. Con estas condiciones, y dada la tasa de desempleo en la provincia, no es de extrañar que el número de operaciones se haya quedado en 17.720 cuando de lo que se trata es de adquirir una vivienda.

Las cifras las hacía públicas ayer el Instituto Nacional de Estadísticas y corresponden a todo 2009, con el grifo de la financiación cerrado a cal y canto. El «vuelva usted el mes que viene» se ha convertido en despedida de manual de todas las sucursales. A los responsables de oficinas bancarias de Cádiz no les extrañó ayer el dato y, sin embargo, aseguraron que no han cambiado las condiciones que ya ofrecían antes de la crisis. Lo que sí ha variado es el valor de la tasación que realiza el banco, muy por debajo de las que tomaba como referencia en la época del boom inmobiliario.

Los que se hipotecaron en 2007 para poner una escritura a su nombre recibían una media de 150.000 euros, que a muchos les servía para pagar el importe completo del piso y los muebles. El flamante propietario de una vivienda en Cádiz -tres dormitorios, salón, cocina, baño y terraza en 90 metros cuadrados- llegaba a firmar un contrato por más de 50 años, lo que conlleva terminar pagando letras con la pensión de jubilación. La situación ha cambiado y los créditos hipotecarios no pasan de los 30 años, sin comprometer más del 30% de la renta mensual para las cuotas. Con estas condiciones era de esperar una nueva caída en picado de las hipotecas, que en el caso de la provincia alcanza el 19%. No obstante, el mercado gaditano resiste mejor que el del resto de Andalucía, donde el batacazo ha sido del 25,6%.

Precisamente Cádiz cerró el año con un aumento en el número de las contrataciones, que puede interpretarse como el primer síntoma de recuperación. Se formalizaron 2.363 operaciones, frente a las 1.978 de noviembre. El primer paso ya lo empiezan a dar las propias entidades bancarias, tal como han reconocido el Colegio de Agentes Registradores de la Propiedad Inmobiliaria y la asociación de usuarios de la banca Ausbanc, pero aún es demasiado pronto para hablar de brotes verdes.

Lejos de la interpretación pesimista de los últimos meses, los futuros compradores se encuentran un panorama más amable: Un plan de fomento de la Junta que garantiza buenas condiciones de financiación, el Euríbor en mínimos históricos y una bajada notoria de los precios de la vivienda. Y los expertos se atreven a decir que esa rebaja aún no ha tocado fondo. Tal vez este sea el mejor año para hipotecarse. El principal reto del futuro comprador es convencer al banco de que se trata de una inversión segura.

Pero las cosas están difíciles. La otra cara de la crisis del sector son los cambios en los acuerdos ya firmados. Un 30% más de los gaditanos solicitaron una revisión de su contrato, la mayoría para revisar los tipos de interés, otra guerra que también tiene difícil victoria.