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Ecologistas pide al Ayuntamiento el Plan de Contingencia de la central
El accidente de Connecticut provoca que se pidan explicaciones sobre cómo se actuaría ante una emergencia
Actualizado: GuardarEl mundo se hace pequeño y la globalización provoca que la información llegue de una zona a otra, casi instantáneamente. Esto ocasiona que sucesos e incidentes ocurridos en otros lugares del mundo puedan tener efectos inmediatos en nuestra zona. Precisamente eso es lo que ha sucedido con el accidente de la central térmica de gas de Connecticut (Estados Unidos) que provocó la muerte de varias personas y que la ciudad sufriera los efectos de la explosión.
Este suceso ha provocado que Ecologistas en Acción haya solicitado al Ayuntamiento una copia del Plan de Contingencia que la Central de Ciclo Combinado de Iberdrola debe tener aprobado. La intención del grupo proteccionista es la ver cómo se actuaría ante un posible incidente de este tipo, para evitar daños en la ciudadanía.
Los ecologistas recuerdan que la central arcense está ubicada a 945 metros de la barriada rural de La Vega de los Molinos, cuando el PGOU y la normativa sobre actividades peligrosas no permiten una distancia menor a 2.000 metros de un núcleo habitado. Esto supone que «los vecinos sufren los ruidos, humos, vapores, el impacto visual directo y la bajada de precios de sus propiedades», destaca el portavoz de este colectivo, Luciano Lozano.
Asimismo, recuerdan que los proyectos iniciales de esta instalación, e incluso la Autorización Ambiental Integrada, nunca hablan de la existencia de un núcleo habitado a esa distancia y «sólo mencionan la que hay con respecto a Arcos», destaca Lozano. La Vega de los Molinos no existía para los promotores políticos y empresariales y tampoco se tuvieron en cuenta las alegaciones y recursos de la Plataforma No a las Térmicas, Ecologistas en Acción, Greenpeace y de la ciudadanía, en los que se denunciaban, entre otras cosas, el tema de la distancia. La entonces consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, le concedió la autorización «a pesar de ésta y otras circunstancias que lo desaconsejaban», consideran desde Ecologistas en Acción.