La Feria se sumerge en el fin de semana antes de su despedida
La jornada del viernes fue algo más tranquila que sus antecesoras, si bien hoy se espera de nuevo un recinto masificado especialmente de jóvenes
«Una feria sin levante tampoco es feria ». Es una de las frases que más se escuchaba ayer cuando el viento sopló fuerte y se dejó notar en el recinto ferial. Ya fuera por culpa del levante, por la intensidad de las jornadas anteriores o por la llegada del sábado, lo cierto es que la de ayer fue una noche más tranquila respecto a acumulaciones de personas.
Tras el día de a mujer, el aspecto de la feria del Día fue el de siempre, es decir un recinto vacío, como una especie de espejismo si no fuera por algunas comidas en determinadas casetas. Luchar para ampliar las horas de fiesta es complicado y parece difícil que se pueda conseguir en julio. El calor se deja sentir y la gente no comienza a llegar al recinto hasta las ocho de la tarde.
De forma escalonada van haciendo su acto de presencia en primer lugar las familias, con los niños para montarse en las atracciones , que ayer estuvieron pendientes del viento. Luego grupos de amigos que llegaban a las cenas y encuentros que se realizan en las diferentes casetas y por últimos los jóvenes que van con sus ‘lotes’ en bolsas de plásticas y camino hacia el paseo marítimo, donde beben antes de dirigirse hacia las casetas en busca de marcha.
Pero sin duda, uno de los grandes día será hoy sábado, cuando el recinto abra sus puertas a la Bahía y acoja a vecinos de Cádiz, Chiclana o El Puerto. El sábado además es una jornada que se estira más allá de las cinco de la mañana, hora oficial de cierre de las casetas, y en busca de ver salir el Sol. También será un día especial porque se celebra el Día del Carmen, su razón de ser con la salida procesional de la patrona a las ocho de la tarde desde la iglesia de El Carmen. Sin embargo, por el viento se ha suspendido otro atractivo, la procesión salinera de la Virgen desde el muelle de Gallineras.
