La familia de Marta del Castillo: «La tortura a la que estamos sometidos no tiene límites»

Los padres de Marta del Castillo, la adolescente asesinada y desaparecida en Sevilla en 2009, han expresado hoy que “la tortura a la que estamos sometidos” por no haber podido encontrar aún el cuerpo de la adolescente “no tiene límites”, y han expresado su esperanza en que la chica aparezca en la porción de escombrera que aún queda por rastrear en Camas, el punto señalado en el test de la verdad por el asesino confeso Miguel Carcaño y al que no dudan en definir como “la esencia del mal”. Tras el parón de ayer, la Policía ha retomado hoy la búsqueda en la escombrera.

Antonio del Castillo y Eva Casanueva han comparecido en rueda de prensa ante las puertas de su casa para desgranar la “sensación de vacío, como de caída libre” que vivieron tras conocer que los huesos hallados en el vertedero de Camas no correspondían a su hija. “El destino se ríe de nosotros”, lamentaba la madre, para quien “ni en las peores pesadillas puede ocurrir que buscando a tu hija te encuentres con otros huesos”. “Parece un caso maldito”, ha insistido, describiendo como a lo largo de la mañana pasaron de la esperanza de un punto y final a cinco años de búsqueda a la decepción absoluta.

El padre de Marta reconocía que fue un día muy difícil, “el más duro desde el día de la desaparición” de su hija, “porque que lo tuviéramos al alcance de la mano y al final no fuera ha sido una tortura”. En esta línea, Eva Casanueva no podía ocultar su “odio y rabia” hacia el asesino confeso y único condenado por la muerte de Marta, cuyos continuos cambios de versión sobre lo sucedido ha impedido localizar el cadáver después de cinco años. “Lo peor es la muerte de una hija, pero la tortura a la que nos tiene sometidos no tiene palabras”, ha dicho.

Para Eva, “la esencia del mal está en ese individuo”, al que ha dicho que solo le desea “que todos los días que pase en la cárcel sean un infierno como el que pasamos nosotros”. En este punto, los padres de Marta han expresado su convencimiento de que Carcaño miente porque mientras no aparezca el cuerpo está protegido en la cárcel porque no se mezcla con otros presos para evitar que sufra su integridad física. “Que no tengan condescendencia con él, que deje de disfrutar de ‘privilegios’ y salga al patio con el resto de presos”, pidió Eva a las autoridades penitenciarias.

Además de agradecer la labor de la Policía, “los únicos en estos cinco años que no nos han defraudado”, la familia de Marta reiteró su convicción de que Miguel no fue la única persona que participó en la muerte de la adolescente, y volvieron a insinuar la participación de su hermano Javier Delgado, absuelto por el Tribunal Supremo. “Hay más gente que lo supo, lo tenemos clarísimo”, concluyó Antonio.