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El Servicio vasco de Salud expedientará a la médico que valoró por teléfono a la niña de Treviño

La investigación indica, no obstante, que el envío de una ambulancia no hubiera evitado la muerte y que no hubo ningún problema de coordinación con Castilla y León

VITORIA Actualizado: Guardar
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El Servicio vasco de Salud incoará un expediente disciplinario a la médico coordinadora de emergencias que valoró de forma telefónica el caso de la niña Anne Ganuza en la madrugada del 17 de marzo, dado que la investigación concluye que la atención "no fue adecuada". Tanto por la duración "excesivamente larga" de la conversación, 5 minutos y 36 segundos, como por la resolución dada a la misma: "No valoró adecuadamente la información recibida", ha señalado este miércoles como parte de las conclusiones el director general de Osakidetza, Jon Etxebarria, ante la comisión de Salud del Parlamento vasco. Y, además, "se apreció déficit de gestión proactiva de la información". La consecuencia de esa conversación fue que la médico no apreció necesidad de enviar una ambulancia al domicilio familiar de La Puebla de Arganzón y se acordó con la madre que fuera ella quien llamara al centro de salud del Condado de Treviño.

El informe, no obstante, señala que el envío de la ambulancia "no hubiera alterado el curso de los acontecimientos", dado que el traslado efectuado por los padres en su propio coche hasta el hospital de Vitoria fue más rápido de lo que hubiera tardado el recurso vital en desplazarse desde la capital alavesa a su domicilio, estabilizar a la niña y completar el camino hasta el hospital de Txagorritxu, a unos 17 kilómetros. Una vez en el centro sanitario, la atención que recibió la niña fue la correcta, indica el informe, pero nada pudo evitar su fallecimiento a las 8.25 horas de esa mañana. En resumen, señala que la decisión de "enviar al médico de guardia en vez de movilizar un transporte sanitario fue una actuación incorrecta aunque sin trascendencia en el desenlace final".

La representante de Pediatria del Hospital Universitario corroboró que la atención hospitalaria, tanto en las anteriores visitas de la niña desde que se tiene constancia de su cuadro de varicela hasta los intentos de reanimación tras el shock fatal que acabó con su vida cumplieron en todo momento los parámetros médicos adecuados. También explicó el gravísimo proceso que se desencadena en el cuerpo en casos como el de Anne, que en sus cuadros más extremos derivan en un elevado porcentaje de mortalidad.

El informe elaborado por el Servicio vasco de Salud elimina cualquier posibilidad de que el fallecimiento de la niña pudiera haberse visto condicionado por el hecho de su residencia en el Condado de Treviño, un enclave perteneciente a Burgos situado en el corazón de Álava. La coordinación, señala la investigación, fue correcta y funcionó bien, como suele hacerlo. La residencia administrativa en otra comunidad autónoma, zanja el informe, no tuvo ninguna relevancia en el triste caso.

La familia denuncia a Euskadi y Castilla y León

La familia de Anne, de otro lado, ha decidido denunciar por "imprudencia con resultado de muerte" a las administraciones de Euskadi y Castilla y León, según se ha sabido hoy. Ha denunciado al 112, que no envió la ambulancia, al servicio de Urgencias de Txagorritxu, por mandarla a casa la tarde del domingo horas antes de su fallecimiento, y al servicio de Salud y Castilla y León, que también la atendió el sábado en Treviño.

La denuncia se ha hecho efectiva en el Juzgado de Instrucción número 4 de Vitoria y en ella se alega una acusación de "posible delito de imprudencia con resultado de muerte". La familia solicita a los servicios de salud implicados que identifiquen a todos los profesionales médicos que atendieron a la niña y también la entrega de las grabaciones del 112, que el consejero vasco dijo haber escuchado pero que no se han hecho públicas.