El paro norteamericano no reduce la tensión

Fuertes descensos en los mercados de renta variable europeos. Los inversores siguen preocupados por la crisis de Ucrania, porque no se ha resuelto. Hay un referéndum por delante para la secesión de Crimea y su anexión en Rusia, algo que, seguramente, es del gusto de Vladimir Putin, pero, quizás, no lo sea de otra parte de la comunidad internacional. Sea como sea, los inversores prefirieron replegarse ante los acontecimientos que podrían tener lugar durante el fin de semana. Uno de los riesgos que se cierne sobre Ucrania es que, como su nuevo Gobierno no es muy amigo del ruso, éste puede exigir pagos por el gas que podría no asumir y, entonces, se podría suspender su suministro. Que la principal razón que llevó a los mercados a caer tuvo que ver con Ucrania se adivina en el hecho de que el Dax alemán fue el peor de todos los índices del Viejo Continente, con una caída del 2,01%. A continuación, el Ibex-35, que retrocedió un 1,36%, para dar un último cambio en los 10.164,20 puntos. El Ftse 100 británico y el Cac 40 francés se dejaron algo más de un punto porcentual, el Ftse Mib de Milán, un 0,98%. Algo mejor lo hizo el PSI-20 de Lisboa, que cedió algo más de medio punto porcentual.

Los índices de Wall Street se comportaban mejor. Al cierre de los mercados del Viejo Continente, el Dow Jones estaba prácticamente plano, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq registraban descensos de un 0,2% y de un 0,5%, respectivamente.

Flaqueaban los indicadores de Wall Street pese al buen informe de empleo publicado en Estados Unidos. Durante el mes de febrero, la economía no agrícola creó 175.000 nuevos empleos, por encima de los 149.000 previstos por los analistas. Además, la cifra del mes anterior se revisó desde los 113.000 hasta los 129.000 estimados por los analistas. También batió expectativas el número de empleos creados por el sector privado: fue de 162.000, por encima de los 154.000 estimados. Y el de empleos del sector industrial (6.000, por encima de los 5.000 previstos). Y el sector público ocupó a 13.000 nuevos trabajadores. Además, los salarios crecieron un 0,4%, por encima del 0,2% previsto, aunque las horas trabajadas bajaron de las 34,3 semanales hasta las 34,2, lo que no es un dato muy favorable. Pero hay que quedarse con lo siguiente: se acelera la creación de empleo. El diciembre, se crearon 84.000 nuevos puestos de trabajo en diciembre, en enero, 129.000 y en febrero, 175.000.

La tasa de paro subió desde el 6,6% hasta el 6,7% por sorpresa.

Mediaset, el mejor valor de la sesión

En el selectivo español, Mediaset fue el valor más rentable de la sesión, con una revalorización del 2,09%. A continuación, Indra, que avanzó un 1,58%. Jazztel, por su parte, subió un 0,99%. Y pocos valores más se salvaron de las pérdidas: ACS, Red Eléctrica, Enagás y Dia.

En negativo, los valores que peor se comportaron fueron los bancos, con el Popular en cabeza: retrocedió un 3,57%. A continuación, CaixaBank, que perdió un 3,09%. Sacyr, FCC, Mapfre, Sabadell y BBVA se dejaron más de un 2%. Con estos números, podemos concluir que los bancos fueron los principales responsables de que el Ibex-35 se convirtiera en uno de los peores índices. Además, el Santander perdió un 1,81% y Bankinter, un 1,60%. Es lógico que se recojan beneficios en los valores que más han subido. Y el Popular, desde principios de año, gana un 21%, Caixabank, un 22%, y Sabadell, un 25%.

Colonial fue el valor más rentable del Índice General de la Bolsa de Madrid, con una revalorización del 5,62%. Deoleo fue el otro valor que subió más de un 5%. En negativo, Tecnocom fue el peor, con un recorte del 6,06%. Fersa, Urbas y Ezentis cayeron más de un 5%.

Prima de riesgo

Pese al cierre del Ibex-35 en negativo, la prima de riesgo de España terminó a la baja: cayó desde los 176 hasta el nivel de los 172 puntos básicos. La de Italia, desde los 180 hasta los 177 puntos básicos. Bajó la rentabilidad del bono español a diez años hasta el 3,37% desde el 3,40%. La de la deuda italiana, desde el 3,45% hasta el 3,42%. La rentabilidad de la deuda alemana subió desde el 1,65% hasta el 1,66%. La de la deuda estadounidense, desde el 2,74% hasta el 2,79%. Éste último es el mejor síntoma de que a los inversores les ha gustado el dato de empleo de Estados Unidos: los inversores han vendido bonos ante la expectativa de que la Reserva Federal continúe con el ritmo actual de retirada de los estímulos monetarios ante una recuperación que parece que se afianza.

En el mercado de divisas, el euro llegó a superar el nivel de 1,39 unidades. Pero, suponemos que también por el dato de paro en Estados Unidos, frenó su escalada y recortó posiciones. Al cierre de los mercados europeos, el tipo de cambio se colocaba en 1,3869 unidades.

En el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, subió un 0,56%, hasta los 108,71 dólares. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, avanzó un 0,75%, hasta los 102,32 dólares. También este comportamiento se debió a las tensiones de Ucrania.

Los metales cayeron con fuerza. Sobre todo el cobre. Pero también el oro: recortó un 0,99%, hasta los 1.338,3 dólares.

Claves de la sesión:

-El Ibex-35 retrocedió un 1,36%, hasta los 10.164,20 puntos. En la semana se apuntó un 0,49%.

-Mediaset subió un 2,09% y fue el mejor valor de la sesión. El Popular y CaixaBank fueron los peores, con pérdidas de más de un 3%.

-La prima de riesgo de España bajó desde los 176 hasta los 171 puntos básicos.