La ONU pide investigar el linchamiento de un hombre en Bangui
Unos 20 soldados uniformados acusaron a una persona de ser un ex rebelde de Séléka y lo mataron a golpes
BANGUI Actualizado: GuardarEl enviado de Naciones Unidas a República Centroafricana (CAR), Babacar Gaye, ha solicitado este jueves a las autoridades del país que tomen medidas contra los soldados que lincharon a un hombre que sospechaban que había sido miembro del grupo rebelde Séléka, minutos después de una ceremonia oficial para reinstaurar a las divididas fuerzas armadas del país en la que la nueva presidenta, Catherine Samba-Panza, ha prometido restaurar la seguridad.
Gaye ha sostenido en declaraciones concedidas a la cadena de televisión británica BBC que el asesinato es "inaceptable" y que "debe ser adecuadamente investigado y los culpables castigados y puestos como ejemplo". "La situación es una muestra del hecho de que la población ha perdido sus referencias. Es aún más preocupante teniendo en cuenta que ha pasado en un organismo que tiene la responsabilidad de controlar las armas y proteger a la población", ha agregado.
Según un testigo, unos 20 soldados uniformados acusaron a una persona de la multitud de haber pertenecido a Séléka, un grupo rebelde integrado mayoritariamente por musulmanes y que tomó el poder en marzo del año pasado, antes de apuñalarle hasta matarle. Un soldado pisoteó posteriormente el cuerpo sin vida, que a continuación fue arrastrado prácticamente desnudo por las calles mientras los residentes contemplaban la escena y tomaban fotos.
El director de emergencias de Human Rights Watch (HRW), Peter Bouckaert, que se encontraba en Bangui siguiendo la ceremonia, 'tuiteó' que el cuerpo del hombre linchado fue quemado y publicó una foto en la que se ve a un hombre mostrando un miembro cortado junto a un fuego mientras un soldado francés hace gestos por detrás.
Diez minutos antes, a unos 20 metros de distancia, la nueva presidenta se había dirigido a un millar de soldados presentes en la ceremonia para volver a presentar al Ejército al país después de que éste desapareciera durante los nueve meses que Séléka ha gobernado el país. "En el plazo de un mes, me gustaría garantizar plenamente la seguridad de gran parte del país, y pretendo cumplir con mi palabra", manifestó la presidenta.
Samba-Panza, designada por el Parlamento hace dos semanas después de que el presidente golpista Michel Djotodia dimitiera bajo la presión internacional, dejó claro que ha llegado el momento de restaurar el orden. "En un cierto punto, todo el mundo tendrá que rendir cuentas por sus actos, estoy advirtiendo a los alborotadores que siguen sembrando el desorden en el país", previno. También instó a los antiguos soldados a que vuelvan a sus puestos, advirtiendo de que los que no lo hagan serán considerados desertores.