Buscan al hombre que disparó a un joven y a su bebé

Rafael Robles García, de 53 años, es el hombre que las fuerzas de seguridad buscan desde el pasado miércoles por la noche como presunto autor del asalto que terminó en la presa del Jerte con tres disparos fallidos contra un joven placentino y su bebé. La Dirección General de Policía, que el lunes había emitido una orden nacional de búsqueda, pidió ayer por la tarde la colaboración ciudadana para detener al agresor, que puede ir armado, al tiempo que hizo pública su fotografía para que fuera distribuida en todos los medios de comunicación y redes sociales. Se le busca por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa, detención ilegal y amenazas graves.

La Policía Nacional pide que cualquier información sobre el paradero de Rafael Robles sea comunicada en los teléfonos 927 426 254 o 927 410 046, o bien en el correo electrónico plasencia.gpj@policia.es. Las aportaciones ciudadanas serán tratadas de forma confidencial. Según la última descripción facilitada, el hombre mide 1,70, es de complexión gruesa, lleva una barba poblada de dos o tres centímetros y la parte de la perilla canosa, y en el momento del asalto vestía un tres cuartos de camuflaje y una gorra tipo escocesa de paño.

Secuestro y disparos

El asalto al joven y su bebé de un año se produjo en la tarde-noche del miércoles día 22 en el garaje comunitario de un bloque de viviendas de la avenida Dolores Ibárruri. El agresor encañonó al joven con dos pistolas y le ordenó que le llevara en coche hasta la presa del Jerte. Una vez allí le dijo que se bajara del vehículo, a lo que la víctima se negó porque no quería dejar al bebé solo. Aprovechó que el asaltante comenzó a salir del vehículo para acelerar a fondo y escapar. El agresor efectuó tres disparos a corta distancia que impactaron contra la luna trasera y la carrocería, pero no llegó a herir ni al padre ni a su hijo.

Desde aquella noche la Policía busca al asaltante, al que consiguió identificar plenamente durante el pasado fin de semana. Estaba de permiso y el sábado tendría que haber regresado a la cárcel de Badajoz, donde cumple condena desde 2001 por un homicidio doloso en grado de tentativa. Aquello ocurrió el 22 de enero de 2001, curiosamente justo 13 años antes del asalto de la semana pasada. Disparó tres veces en una plaza del barrio de San Lázaro de Plasencia con una pistola de nueve milímetros contra un hombre con el que ese mismo día había mantenido una discusión de tráfico, y le alcanzó en la pierna derecha.

En la ficha policial de Rafael Robles constan otros antecedentes. En 1990 fue detenido al estar reclamado por la Comisaría de Tudela (Navarra) por una agresión con arma blanca. Unos meses después volvieron a detenerle por tenencia de drogas, y en 1992 por venta de estupefacientes. Su última detención previa al intento de homicidio de 2001 fue por agredir a una drogadicta.

La Policía cree que Rafael Robles podría haber abandonado ya la ciudad. «En Plasencia hemos buscado en todos los sitios en los que podría y debería estar, y no está», afirmó ayer el jefe superior de Policía en Extremadura, Miguel García Izquierdo. «Seguramente mañana (por hoy) tengamos sorpresas», apuntó el delegado del Gobierno, Germán López Iglesias. También se han realizado pesquisas por parte de la Guardia Civil en Talayuela, localidad en la que nació Robles.

Motivo del asalto

De forma paralela a la búsqueda del presunto agresor, la investigación se está centrando en los motivos que éste pudo tener para asaltar de ese modo al joven padre y a su bebé, y con qué intenciones les obligó a llevarle hasta la presa. La Policía no descarta por el momento ninguna hipótesis, e incluso contempla la posibilidad de que el asaltante se confundiera de víctima y fuera en realidad buscando a otra persona. La opción de que eligiera al azar con el robo como móvil también está sobre la mesa.

Lo que sí han dejado claro todas las fuentes consultadas es que la víctima no tiene ningún tipo de antecedentes ni de vínculos con actividades delictivas. Este hecho, que se tratase de un joven placentino normal, que regresaba a casa junto a su bebé de un año, es el que ha generado una importante alarma social en la ciudad durante los últimos días, especialmente entre los vecinos que viven cerca de los escenarios del suceso. Ayer por la tarde, antes de que la Dirección General de Policía difundiera la fotografía del presunto agresor y pidiera la colaboración ciudadana, ya habían comenzado a circular por los sistemas de mensajería instantánea imágenes con su rostro y sus datos.