¿Y si es un niño superdotado?
Diagnosticarlos a una edad temprana y saber cómo ayudarlos a gestionar sus extraordinarias capacidades son las claves para que lo vivan con normalidad
MADRID Actualizado: GuardarMaximilian Janisch se presentó, por pura diversión, al examen de matemáticas que los chicos suizos tienen que pasar para cursar Bachillerato. Lo más curioso no fue su nota, que también (sacó la máxima calificación), sino su edad (tiene diez años). Sus padres, un profesor de matemáticas jubilado y una economista, estaban tan orgullosos que querían matricularlo en la universidad, pero las autoridades académicas se lo impidieron. Así que está cursando Secundaria: “En el instituto, igual que en Primaria, no hay nada que me estimule –se lamenta en una entrevista en el periódico 'SonntagsZeitung'–. No encuentro a nadie con quien hablar de Arquímedes, y la mayoría no sabe quién es Carl Friederich Gauss”, cuenta.
Con ligeras variaciones, esto es lo que les ocurre a un 2% de los niños en España. “Aunque esta cifra sólo contabiliza a los que poseen altas capacidades intelectuales, que es lo único que actualmente contempla la ley de Educación, cuando en realidad se deberían tener en cuenta también las altas capacidades en las artes, la música, la creatividad,... o los talentos específicos, como el matemático o el lingüístico, lo que subiría el porcentaje a un 5% del ratio de alumnos con necesidades educativas especiales”, apunta Alicia Rodríguez, presidenta de la Asociación Española para Superdotados y con Talento. (Más información en Mujerhoy.com)