Repóquer de ases en el estreno mundialista
Igor Astarloa, Abraham Olano, Óscar Freire, Pedro Delgado y Miguel Indurain ruedan en Ponferrada. Siete maillots arco iris, seis triunfos en el Tour, dos Giros, tres Vueltas y tres Milán-San Remo analizan el recorrido
PONFERRADA Actualizado: GuardarFue un reencuentro entre viejos conocidos, entre asiduos de los podios de los mundiales, de ruta y contrarreloj, de Tour, Giro, Vuelta a España o Milán-San Remo.
Óscar Freire, Abraham Olano, Igor Astarloa, Miguel Indurain y Perico Delgado estuvieron en Ponferrada, rodando en el circuito en el que se celebrarán los Campeonatos del Mundo en carretera de 2014, entre el 21 y el 28 de septiembre, cuando se disputará la prueba en línea para los profesionales. Ninguno de ellos tenía la misma opinión sobre lo que habían visto en los 18,2 kilómetros que tiene el trazado, informa Diario Vasco.com.
Eso es lo mejor que le puede pasar a un Campeonato del Mundo, que nadie esté de acuerdo sobre la dureza de un circuito al que se darán catorce vueltas para totalizar 254,8 kilómetros, de los que 102,6 serán en subida. Hay dos ascensiones en el trazado de cinco y cuatro kilómetros, una de 200 metros otra de 1,2 kilómetros. Además tendrá 56 kilómetros de bajada.
Para Olano, el más en forma de los cinco ex campeones que se reunieron junto a Igor Astarloa, «el circuito es rápido y duro. Menos duro que el de Duitama (Colombia), donde conseguí el título, pero se hará más duro por la velocidad. En las tres últimas vueltas se producirá una escabechina. Me parece idóneo para Valverde, pero también para Sagan», explicaba el tolosarra.
Olano sigue siendo el único corredor en la historia mundialista que ha sido campeón del mundo en línea y contrarreloj. Nadie lo ha conseguido desde que él lo logró.
A Freire le gustó
Óscar Astarloa le preguntó al otro Óscar, Freire, en cuanto le vio, si había traído zapatillas. Se lo dijo riéndose «He traído dos pares por si se te habían olvidado, a lo que le contestó el cántabro: «Esta vez no se me ha olvidado nada».
Para el triple campeón mundial, «las subidas son como las del mundial de Madrid. La bajada se hace muy rápida y en la parte final, después de tantos kilómetros, se notará mucho. De la subida larga (la de cinco kilómetros), la parte final se pega mucho. Es lo que más daño va a hacer cuando se lleven once vueltas. Si la carrera se hace rápida, los sprinters no llegarán, salvo Sagan, al que le da igual cómo vaya la carrera. Si el viento de pega de frente será peor».
Para quienes han sido sus compañeros en los últimos años, Valverde y Purito Rodríguez piensa que «cuanto más duro sea para ellos, mejor. Es un circuito en el que me hubiera gustado correr, pero lo veré vestido de calle». Freire ha cambiado las dos ruedas por los rallys de coches antiguos, es decir, por las cuatro. Ha corrido dos, «y no me han ido muy bien». Decía entre risas.
Igor Astarloa, que ganó el mundial de Canadá, continúa entre las dos ruedas, sólo que ahora corre pruebas de enduro, o se va en moto desde Ermua, donde vive, hasta Italia: «Con la moto no he tenido ningún percance importante. Alguna caída, pero sin más».
Indurain, modesto
Respecto al recorrido mundialista de Ponferrada lo ve «duro, pero no durísimo. Todo va a depender de la batalla que haya, de lo que digan los corredores. Si se va rápido, sí se puede complicar bastante. También influirá el tiempo. Si estaba mojado será todavía peor».
Miguel Indurain, modesto como siempre, lo dejaba claro antes de comenzar a hablar: «Los mundiales no han sido lo mío, así que mucho no puedo decir. No me parece un trazado excesivamente duro. La parte que discurre por la ciudad es cómoda. Luego, sí, la zona de los repechos es complicada y la bajada hasta la ciudad es rápida. A Valverde le vendría mejor un recorrido un poquito más duro. No veo una llegada en grupo. Es difícil que en un mundial se llegue al sprint».
Indurain, como sus otros cuatro compañeros 'mundialistas', no se moja en invierno saliendo en bicicleta, aunque ayer les cayó a todos algo de agua. Si comienza a hacer kilómetros afina rápido: «Los mundiales son complicados de gestionar, son muchos kilómetros, hay situaciones complicadas de controlar. No es fácil».
Perico Delgado, que estuvo muy animado toda la mañana, comentó cuando le hicieron coger un maillot arco iris para las fotos: «De este no tengo, no he ganado nada de este color». Delgado, como no podía ser menos, abogaba «por un recorrido muchos más duro. Son subidas que con el nivel que hay hoy en día en profesionales no rompe. Si le da por llover si que habrá dureza, de lo contrario, no. Pueden llegar un grupo de treinta corredores al sprint. Es una pena que la UCI no haya permitido más dureza».
En total, se dieron cita en Ponferrada, donde después de muchas vicisitudes parece que el Campeonato del Mundo está enderezado, siete maillots arco iris, seis triunfos en el Tour, tres Vueltas a España y tres Milán-San Remo. Nadie mejor que ellos para estrenar el trazado.
Los organizadores ya han pagado tres millones de euros de los cinco que deben de pagar de canon a la UCI, en un mundial que se puede ir a los conoce millones de presupuesto entre unas cosas y otras. Para estrenarlo en carrera podrían organizar los Campeonatos de España.
A Javier Mínguez, el seleccionador, tampoco le terminaban de llenar esos dieciocho kilómetros: «Es un circuito duro, pero no selectivo. El recorrido que teníamos previsto si resultaba más duro, pero a la UCI le gustaba más este y será con el que tengamos que apechugar». En cualquier caso, no les va mal a los posibles líderes de la selección española, aunque cuando llegue el mes de septiembre, con toda la temporada encima, habrá que ver como se encuentra la gente de forma física. No nos va mal con los corredores que tenemos, pero será difícil hacer una selección importante».