Una reforma que no contenta a nadie

Dicen que los extremos se tocan y el tema del aborto no ha sido la excepción. Desde las posturas más conservadoras hasta las ideas más liberales han coincidido en que el anteproyecto del Gobierno de Mariano Rajoy no les gusta. Para nada. Tan poca aceptación tiene que ya han comenzado a manifestarse. La organización Derecho a Vivir se ha concentrado a las puertas del complejo de la Moncloa para mostrar su rechazo a la normativa por quedarse. Este colectivo aboga por la prohibición total del aborto, una postura que defiende la Iglesia católica y que ha transmitido en numerosas ocasiones la Conferencia Episcopal. "No queremos simple maquillaje", ha indicado su presidenta Gador Joya. Los representantes de este grupo coincidieron con Decidir nos hace libres, organización que aglutina a 300 asociaciones en defensa de los derechos sexuales y reproductivos y a clínicas abortivas.

La presidenta de este grupo Isabel Serrano, se ha mostrado totalmente en desacuerdo con la reforma porque supone un retroceso en este apartado con respecto a los países europeos. "Esto es una locura en un país democrático; esta ley nos sitúa en una posición de vergüenza en el entorno europeo; hay muchas razones para estar en contra y muy poquitas para estar a favor del cambio de una ley que está funcionando de manera impecable desde 2011", ha aseverado a Efe, entre carteles con los lemas 'Millones de mujeres sufren las secuelas del aborto inseguro' o 'PP enemigo de la libertad de las mujeres'. Estos colectivos también se van a manifestar por la tarde en numerosas ciudades españolas para mostrar el rechazo a este proyecto.

En el ámbito político, los partidos también han mostrado su postura. PNV ha asegurado que esta modificación solo se debe a la presión de los "sectores más reaccionarios", mientras que el diputado de UPyD Toni Cantó ha pedido al Ejecutivo central un "debate serio y en profundidad sobre este asunto". Por su parte, el consejero de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, ha considerado innecesario que el Gobierno reforme la ley del aborto, porque entiende que la regulación actual funciona bien y no representa ningún problema, y ha augurado que los cambios previstos por el Ejecutivo de Mariano Rajoy "seguramente" generarán un nuevo conflicto con el Estado. También la Junta de Andalucía ha criticado los planes del ministro de Justicia. La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez Rubio, ha apuntado que es un "serio retroceso" el cambio en la normativa sobre interrupción voluntaria del embarazo.