Luz verde a la ley que subirá el límite de velocidad a 130 km/h

Los menores de 16 años tendrán que llevar obligatoriamente casco en bicicleta, habrá tramos de autovía y autopista que puntualmente aumentarán la velocidad permitida a 130 km/h, quedarán prohibidos tanto los detectores como los inhibidores de radar y las multas serán de 1.000 euros para todos aquellos que doblen el alcohol permitido al volante o se nieguen a realizar las pruebas para detectar su presencia. La reforma de la Ley de Seguridad Vial ha finalizado este martes su trámite en el Congreso de los Diputados sin novedad.

La Comisión de Interior, con competencia legislativa, ha ratificado, con pequeñas modificaciones, el texto que el Gobierno envió al Parlamento. Esto ha motivado la queja generalizada de todos los grupos parlamentarios en una sesión anodina que ha sido repetición de todos los debates realizados en los dos últimos meses sobre esta normativa.

El portavoz del Grupo Socialista, Juan Carlos Corcuera, ha calificado de "innecesaria" e "incompleta" una reforma de la Ley de Seguridad Vial que "sirve para dar cobertura jurídica a un Reglamento de Circulación" que fue anunciado con anterioridad tanto por el ministro Jorge Fernández Díaz como por la directora general de Tráfico, María Seguí. El diputado socialista ha denunciado que el proyecto de ley sale de la cámara baja "sin consenso", un acuerdo que siempre ha estado presente en materia de seguridad vial en todas las normas aprobadas al respecto desde la llegada de la democracia.

Durante el debate los parlamentarios de la oposición han elogiado el talante dialogante de la portavoz del Grupo Popular María Concepción Bravo, una disposición que no han visto en el Ministerio del Interior a la hora de consensuar los puntos. Así el tema más candente, la obligación de que los menores de 16 años tengan que llevar casco en vías urbanas, ha sido aprobado con la mayoría de PP y el apoyo de CiU -aunque los catalanes habrían preferido rebajarlos a 12 años- aunque la ponencia encargada en el Congreso al respecto no ha emitido aún su informe.

El PSOE ha calificado la medida de "desproporcionada" y ha dicho que "podría llevar a situaciones no deseadas" en caso de que un menor se viera involucrado en un siniestro con un coche y no llevase el casco. Desde el Grupo de Izquierda Plural, Ricardo Sixto Iglesias ha apuntado que esta obligación fomentará que los jóvenes, en lugar de la bici opten por el ciclomotor. Mientras que para el diputado de UPyD Toni Cantó, es una solución "cobarde" en un momento en el que ha de primarse la sostenibilidad. En su opinión, la política del Gobierno es la de "aumentar las multas y disminuir las inversiones en infraestructruras".