Una sorpresa para los devotos de Stanislaw Lem
La editorial Impedimenta publica ‘Máscara’, una recopilación de trece cuentos del maestro de la ciencia ficción que nunca hasta ahora habían sido traducidos al español
MADRID Actualizado: GuardarStanislaw Lem era un genio inclasificable. En Alemania es tenido por un filósofo, en Rusia por un científico y en Polonia, su patria, por un escritor de libros para niños. Su talento inabarcable le hace merecedor de ser considerado un grande de la literatura fantástica. Los devotos de este escritor de múltiples registros tienen motivos para felicitarse. La editorial Impedimenta acaba de publicar ‘Mascara’, una compilación de trece relatos que permanecían inéditos en español. Cuentos en los que asoma la clarividencia, el espíritu socarrón y las inquietudes filosóficas de un creador cuya figura se ha agigantado con los años.
La inteligencia de Lem era portentosa. Fue ginecólogo, publicó trabajos sobre genética y teoría de la de la probabilidad, conocía al dedillo los libros de Einstein, Heisenberg y Wiener y además sobrevivió al Holocausto. Pocos escritores han cultivado disciplinas tan dispares y con tanto aprovechamiento como Lem. Conocía pues el horror y el espanto, la pesadilla del genocidio nazi -no en vano muchos de sus amigos acabaron sus días en hornos de gas de Belze- y el delirio comunista que vino después.
Los trece relatos reunidos en ‘Máscara’ participan de lo mejor del escritor nacido en 1921 en Lvov (entonces Polonia, hoy en territorio de Ucrania). En el volumen hay alienígenas que inducen a la reflexión metafísica, hay humor negro, hay elucubraciones sobre nuevas formas de inteligencia. En definitiva, el lector puede encontrar al Lem de ‘Solaris’ y el estilo ácido y desternillante del autor de 'Diarios de las estrellas'.
Enrique Redel, editor de Impedimenta, se encontró con este libro casi por casualidad. Quería publicar la novela ‘La nube de Magallanes’, pero los herederos prefirieron no cederle los derechos porque el escritor no la consideraba digna de su producción literaria. Así que en vez de ese título de ciencia ficción, le propusieron publicar los cuentos que, estos sí, son tributarios de la brillante sabiduría del prosista.
Las antologías tradicionales de cuentos de Lem que circulaban en Polonia no incluían estos relatos recogidos en ‘Mascara’ porque los editores habían prescindido de ellos, bien por razones temáticas, bien porque abarcaban una trayectoria de cuarenta años. El más antiguo data de 1957 y el más reciente, ‘La colchoneta’, que clausura la recopilación, es de 1996.
El cuento ‘Máscara’, que da título al volumen, cuenta las vicisitudes de un robot que aspira a sustraerse de su destino y conquistar el libre albedrío. La posibilidad de crear inteligencia artificial es un asunto recurrente en el libro y reaparece en cuentos como ‘El amigo’ o ‘La fórmula de Lymphater’. En ‘El moho y la oscuridad’, unos investigadores logran el hito de transformar una bacteria, pero el hallazgo se convierte en un mal sueño ya que el microorganismo es capaz de arrasar con todo lo que se le ponga por delante.
‘La invasión de Aldebarán’ está impregnado de ese temperamento burlón que anida en ‘Diario de las estrellas’. Cuenta la historia de unos extraterrestres poseedores de una refinadísima tecnología con la que podrían dominar la humanidad. Para pasmo de los pobres alienígenas, esos prodigios de la técnica de poco les sirven para enfrentarse con unos humanos un tanto prosaicos a quienes la llegada de estas criaturas apenas causa extrañeza.
Lem dio sus primeros pasos como narrador con 'El hospital de la transfiguración' (1947), que describe las penalidades de unos facultativos polacos en un centro para enfermos mentales ante la llegada inminente de las tropas del Tercer Reich.
Entre 1959 y 1964 alumbró sus grandes novelas de madurez: 'Edén', 'Memorias encontradas en una bañera', 'Retorno de las estrellas' o 'El invencible'. En 'Solaris' (1961), su obra maestra y uno de los libros capitales del siglo XX, Lem recrea el mito de Orfeo a través de la exploración de un planeta capaz de materializar los recuerdos. Así, el protagonista tiene la extraña oportunidad de revivir en el espacio una historia de amor con su esposa, quien se quitó la vida en la Tierra.