La lesión de Valdés, un lastre para el Barça y un problema para la Federación

Víctor Valdés aterrizó en Barajas apoyándose en dos muletas, señal inequívoca de que su rotura fibrilar, provocada tras sufrir lo que los médicos denominan el 'síndrome de la pedrada', era muy seria. Poco después, ya en Barcelona, se conoció el alcance real de su percance: seis semanas de baja por una «rotura miotendinosa proximal al gemelo interno de la pierna derecha». Seguro que el interminable viaje de regreso desde Sudáfrica no fue el mejor aliado del músculo.

El portero del Barça, su jugador más regular en este inicio de su última temporada como azulgrana, no volverá a jugar hasta 2014 y se perderá como mínimo cuatro partidos de Liga (Granada, Athletic, Villarreal y Getafe), dos de Copa (los 1/16 ante el Cartagena) y dos de 'Champions' frente a Ajax y Celtic.

José Manuel Pinto, el guardameta suplente que sólo iba a disputar los encuentros coperos en esta serie de partidos, será el encargado de proteger la excepcional racha de su equipo, todavía invicto en todas las competiciones. El entorno culé no confía demasiado en él pese a que nunca ha desentonado cuando ha comparecido. Ha sido el titular en tres finales de Copa, dos de ellas ganadas al Athletic y una perdida frente al Madrid. No le ayuda que en las últimas horas se hablara de Pinto por imitar el escorpión de Higuita en un entrenamiento, a la perfección, eso sí, y que al mismo tiempo de la lesión de Valdés apareciera en un programa de televisión, 'El Hormiguero', hablando de la música hip hop que produce y compone.

La baja de Valdés se une a las de Messi y Jordi Alba en una semana complicada para el Barça: Xavi y Tello son duda para el sábado ante el Granada por molestias en los isquiotibiales y en el tobillo, respectivamente, al igual que Alves, que vuelve tocado de la selección de Brasil sin haber podido disputar ninguno de los dos partidos. Piqué se encuentra entre algodones, también con los isquiotibiales afectados, motivo por el que no viajó con España. Y se espera que Cesc sí reciba el alta tras siete días de baja por una leve lesión de rodilla que sufrió ante el Betis. Mascherano vuelve de Argentina con una mano vendada, mientras que Neymar y Alexis disutaron 90 minutos en la madrugada del martes al miércoles en Toronto (Canadá). En la enfermería habrá trabajo.

Imagen deteriorada

La lesión de Valdés fue el remate final a la criticada gira de la selección española por el continente africano. La derrota en Sudáfrica (1-0) castigó en lo deportivo a una imagen de la Federación que también quedó muy tocada a nivel institucional. Entre otras cosas, rogar para que Reina pudiera suplir a Valdés con todos los cambios realizados, por humana que fuera la postura, demostró que España estaba en Johannesburgo homenajeándose por el Mundial 2010 ganado allí, mientras que la selección local buscaba un triunfo de prestigio ateniéndose a las reglas. Ver a Arbeloa con la camiseta de portero esperando el desenlace de la 'negociación' fue otra escena esperpéntica.

Viniendo de Guinea Ecuatorial (1-2), donde 'La Roja' protagonizó otro partido horroroso, con "inhibición" voluntaria de muchos jugadores para evitar golpes, como reconoció el propio Vicente del Bosque, se comienza a advertir una peligrosa autocomplacencia a todos los niveles a pocos meses del Mundial. La calidad se mantiene, pero sobre las ganas de jugar, por lo menos amistosos, hay sospechas. El problema es que para preparar la gran cita ya sólo queda un amistoso, ante Italia, el 5 de marzo en el Calderón. El seleccionador tiene mucho trabajo por delante. Da la sensación de que son muchos los jugadores que se creen con una plaza asegurada. Asunto peliagudo.