Un falso payaso mata a un narco mexicano durante una fiesta

El Gobierno del estado mexicano de Baja California Sur confirmó anoche el asesinato anoche de Francisco Rafael Arellano Félix, exlíder del cártel de Tijuana, a manos de un falso payaso durante una fiesta familiar, según los medios. El subprocurador de Investigaciones Especiales de la Fiscalía estatal, Isaí Arias, indicó a la prensa que sus familiares identificaron el cuerpo de la víctima esta mañana.

Arellano Félix recibió un impacto de bala en el tórax y otro en la cabeza, disparos que provocaron su muerte. El periódico Tribuna de Los Cabos informó que durante una fiesta infantil en la zona turística de Los Cabos un individuo vestido de payaso disparó contra Arellano Félix en la cabeza y lo remató cuando estaba en el suelo, para luego huir del lugar.

Arellano Félix, de 63 años, fue detenido en 1993 y condenado en México a 10 años de prisión tras ser encontrado culpable de delitos contra la salud, cohecho y posesión ilegal de arma de fuego. En septiembre de 2003, poco antes de cumplir su sentencia, el Gobierno de Estados Unidos solicitó su extradición ya que desde 1980 una corte de California emitió una orden de detención por narcotráfico.

La extradición fue autorizada por un juzgado mexicano en 2004 para un proceso pendiente en Estados Unidos, desde donde fue repatriado en 2008 después de alcanzar el beneficio de una reducción de condena impuesta en ese país. Algunos medios lo identifican como exlíder del cártel de Tijuana, también conocido como cártel de los hermanos Arellano Félix, que monopolizó las rutas del narcotráfico durante más de 20 años a través de Tijuana, pero que comenzó a desmoronarse con la muerte de su líder Ramón durante un tiroteo con policías mexicanos en 2002.

Su hermano Benjamín Arellano Félix fue extraditado desde México en 2011 y sentenciado a 25 años de prisión en una corte federal estadounidense en abril pasado. También otro hermano, Eduardo Arellano Félix, fue sentenciado en agosto pasado por un tribunal de Estados Unidos a 15 años de cárcel, mientras que un tercer hermano, Francisco Javier, cumple cadena perpetua tras su captura en 2006 por la Guardia Costera de EEUU. La organización criminal también se ha visto mermada por la rivalidad de bandas, entre ellas el cártel del Pacífico y el de Juárez.