'Breaking Bad' se sintoniza en Downing Street

El primer ministro británico, David Cameron, reconoció anoche que su programa de televisión favorito es la serie estadounidense 'Breaking Bad', que el domingo concluyó con su último episodio en la cadena AMC, y aseguró que desde el primero de sus capítulos le pareció "extrañamente fascinante". "Recuerdo ver el primer episodio y no creer lo que estaba pasando, un hombre bastante decente que termina tan terriblemente mal. Es (una serie) bastante adictiva, no puedo explicarlo", afirmó Cameron en una distendida entrevista al Channel 4 británico.

El 'premier' de Reino Unido, que negó entre risas cualquier atisbo de comparación con Walter White, un profesor de química reconvertido a magnate de la droga, declaró que no ve mucha televisión y que, cuando lo hace, busca una vía de "escape". La confesión de Cameron sobre sus gustos televisivos llega precedida de la de otros dirigentes internacionales que incluso han contribuido a impulsar una serie o programa al reconocerse seguidores. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, admitió en 2012 su admiración por 'Homeland'