La ausencia de Cristiano Ronaldo empaña el estreno musical de su hermana

Todos esperaban la llegada de Cristiano Ronaldo, pero del jugador no hubo ni rastro. El galáctico era el invitado estelar de la presentación del nuevo disco de su hermana, Katia Aveiro, anoche en el Moma de Madrid, pero la enorme expectativa generada -amplificada más si cabe por el reciente anuncio de su renovación por el Real Madrid- quedó finalmente en nada. Además de alguna cara más o menos conocida de la escena musical o televisiva, la cantante estuvo arropada por el resto de su familia, su madre y su hermana Emma, que no pudieron evitar que la puesta de largo en España de la artista quedara empañada por el gran ausente.

Aveiro, que agradeció a su familia y a la prensa el apoyo recibido, presentó en directo un avance de su último disco -primero con su verdadero nombre y no como 'la Ronalda', como se la conoce hasta ahora-, cuyo lanzamiento está previsto para noviembre. Su objetivo, afirma, es repetir en las pistas de baile la magia que su mediático hermano reproduce en el campo y para ello ha fichado por RedOne, compositor y productor de origen marroquí conocido por sus trabajos con Lady Gaga, Jennifer López, Paulina Rubio, Pitbull o Enrique Iglesias.

Por ahora el primer single de la portuguesa, 'Boom Sem Parar', ya supera el millón y medio de visitas en Youtube, auspiciadas en gran parte por una mención de su hermano en su perfil de la red social Twitter, y calienta un lanzamiento que verá la luz en noviembre. "¡Esto es el comienzo de mi carrera internacional!", vaticinaba la hermana del futbolista en declaraciones recogidas por su representante antes de su viaje a España.

Katia Liliana Dos Santos Aveiro -su nombre artístico es Katia Aveiro- vive en Lisboa, tiene 35 años y es madre de dos pequeños, Rodrigo, de 12 años y Dinis, de 3, ambos fruto de su relación con José Pereira, con el que afirma mantener una buena amistad. Antes de lanzarse a desarrollar su carrera como cantante, el sueño de su vida, la 'Ronalda', como la conocen también en el país vecino, dirigió una tienda de ropa inspirada en su hermano en su Madeira natal. El sueño, aunque deslucido, parece haberse cumplido.