Twitter levanta el vuelo hacia Wall Street

Twitter ha levantado el vuelo. Hacia Wall Street. Abandona el nido para enfrentar un salto mortal con doble tirabuzón: su estreno a Bolsa. Todavía no se conoce el día en el que el jilguero más famoso de la red pose sus patas en el parquet estadounidense. La compañía fundada por Jack Dorsey y manejada desde hace meses por Dick Costelo confirmó anoche en apenas 148 caracteres que había rellenado el formulario de inscripción que le exigen las autoridades norteamericanas para el selecto club de valores de la bolsa neoyorquina. "Hemos presentado el impresa S-1 a la SEC para una oferta pública de venta", reza el mensaje publicado ayer en la cuenta oficial. "Este 'tuit' no constituye una oferta de venta de valores", apuntillaba la dirección de la compañía para después publicar una foto acompañada de "ahora, vuelta al trabajo".

La salida a Bolsa de la red social de 'microblogging' es una de las noticias más rumoreadas y esperadas en el gremio tecnológico después del no del todo afortunado estreno de Facebook en el Nasdaq, en mayo del pasado año. Las altas expectactivas despositadas en la firma de Mark Zuckerberg le llevaron a convertise en un auténtico globo sonda que, tras conseguir un estreno histórico, empezó una rápida y abrupta caída que llevaron a los títulos de la compañía a navegar por una valoración discreta, muy alejada de los 38 dólares que fijaron como precio de salida. Tras un año de idas y venidas, la red social por excelencia ha conseguido recuperar las constantes vitales y atraviesa por un buen momento con sus acciones cerca de los 44 dólares.

Twitter podría estar valorada en unos 10.000 millones de dólares. Hasta la concreción de la oferta pública de venta, algo que muchos marcan para el primer semestre de 2014, quedan todavía unas cuantas semanas de especulaciones. Aunque nunca negaron la mayor, en los cuarteles generales de la compañía trataron de enfriar los rumores que ocupaban los mentideros digitales en más de una ocasión. "Tenemos un camión lleno de dinero en el banco", afirmaba Dick Costolo en julio del pasado año . "Seguiremos siendo una empresa privada el tiempo que queramos", explicaba el directivo, dando a entender que en ese momento habían aparcado las motivaciones de entrar al juego de los tiburones de Wall Street. Una decisión en la que con casi toda seguridad tuvo que ver la experiencia de Facebook.

Aunque hubiese resultado tremendamente alegórico mandar a una paloma mensajera con la documentación, en Twitter han preferido escoger el camino más discreta para dar este primer paso de la operación. Se han acogido a una vía confidencial que contempla la regulación de Estados Unidos para aquellas empresas que sus benefícios anuales se situén por debajo de los 1.000 millones de doláres por lo que habrá que esperar para conocer los guarismos de esta acción.