Actor, una profesión de alto riesgo
Algunas estrellas de cine se preparan físicamente para rodar ellos mismos las escenas más peligrosas sin la necesidad de utilizar un doble
MADRID Actualizado: GuardarVer una película sirve para soñar e imaginarse que cualquiera es capaz de saltar desde una azotea a otra sin hacerse ningún rasguño, que si vas a parar a una isla desierta hay recursos suficientes para sobrevivir y hacerse amigo de un balón de nombre Wilson, o que es posible escapar de una explosión en el último minuto. Para que eso sea viable, los actores han de prepararse durante muchos meses para que su actuación sea creíble y que el espectador llegue a sentir todas las emociones y sentimientos. Sin embargo, las acciones de riesgo ponen en peligro la vida del actor, es por eso que ciertas estrellas recurren a dobles especializados para que hagan su papel.
Miles de adictos a la adrenalina se ponen delante de la cámara para rodar las escenas más peligrosas del guión, sin embargo, no todos pueden llegar a cumplir su deseo de saltar desde un helicóptero a punto de explotar. Algunos actores se preparan físicamente para rodar ellos mismo las secuencias más difíciles. Puede que sea por orgullo o por querer sentir la misma adrenalina que sus dobles. Christian Bale, Matt Damon o Viggo Mortensen son algunas de las estrellas que dejan sus miedos a un lado y se lanzan a rodar la mayoría de las escenas.
En las entregas de Batman, el propio Christian Bale fue el encargado de realizar las peleas en las que el hombre murciélago se tenía que enfrentar a todos los villanos que querían destruir Gotham. Así mismo, en el film ‘Rescate al amanecer’ se atrevió a colgarse de un helicóptero en el aire. Viggo Mortensen es otro actor que tampoco conoce lo que significa la palabra miedo. Para el rodaje de ‘El señor de los anillos’ se preparó a fondo, tal fue su entrega que en una escena de esgrima perdió un dientes. Pero su escena más peligrosa tuvo lugar en ‘Hidalgo’, donde galopaba a velocidades de vértigo. Gracias a su experiencia como jinete no se hizo ni un solo rasguño.
Reconocimiento a la labor
El actor de la trilogía de Jason Bourne se entregó en cuerpo y alma en todas las escenas, muestra de ello es que a pesar de tener pánico a ahogarse, grabó todas las escenas bajo el agua. En cambio, cuando se trató de rodar al aire libre Matt Damon se lo pasó en grande en las persecuciones y choques de automóviles. Pero si hay una estrella por excelencia en esto de no utilizar dobles es Jackie Chan. Adorado tanto por especialistas como por actores, en sus películas siempre esta el lema de “todo sin dobles”. Es capaz de pelear contra diez karatekas o deslizarse por la pared aprovechando una mínima inclinación. Las cicatrices y las docenas de fracturas que ha sufrido a lo largo de su carrera demuestran que hasta el más preparado puede sufrir algún que otro revés.
Daniel Craig en ‘James Bond’, Tom Cruise en ‘Misión imposible’ o Jasón Statham en ‘Transporter’ y ‘Crank’, son otros de los actores que optan por ser ellos quienes conduzcan coches a toda velocidad, saltar de un tercer piso a un autobús en marcha, o escalar sin ayuda una pared de piedra. ¡Auténticos ‘super actores’! No obstante, no todos los actores que se arriesgan consiguen salir ilesos. Brandon Lee, hijo de Bruce Lee, perdió la vida en la película ‘El Cuervo’. Él mismo realizó las peleas y escenas de riesgo, pero la fatalidad quiso que en una escena en la que el riesgo era mínimo perdiera la vida. Una bala de fogueo fuego fue sustituida por una real.
A pesar de las mejoras de seguridad de los últimos años, todavía hay cientos de expertos que se juegan la vida en cada paso que dan. Jack Gill lleva desde mediados de los 70 haciendo todas las locuras junto a algunos de los más grandes nombres de la industria. Y cada año, desde 1991, Gill ha propuesto al Consejo de la Academia la introducción de una nueva categoría de Coordinador de Dobles. Para que salga adelante la propuesta, es necesaria una mayoría simple de los miembros del consejo, pero a pesar de contar con el apoyo de miembros de alto perfil cada año se produce el mismo resultado. "Es desesperanzador, porque uno puso su corazón en ello. Estás sentado enfrente de la tele, viendo que todos los otros departamentos están allí, pero tú no", explica Gill. Sin embargo, algunos piensan que ya tienen su premio, el Taurus, que se otorga cada año en Los Ángeles.
Gracias a la ardua labor que desempeñan los dobles de acción, los espectadores pueden dar rienda suelta a su imaginación, y algunos actores no tan arriesgados, saben que su vida no corre peligro siempre que se tenga que saltar desde helicópteros o enfrentarse a una pelea a puñetazos.