Las víctimas del accidente de Spanair reclaman un juicio

La Asociación de afectados del vuelo JK5022 ha rendido esta mañana un homenaje a las 154 personas que perdieron la vida en el accidente de Spanair, del que este martes se cumplen cinco años. Los actos, que han tenido lugar en el Parque Juan Carlos I y en los monumentos levantados en el aeropuerto de Barajas en recuerdo de la tragedia, han contado con la participación de la ministra de Fomento, Ana Pastor, y Pilar Vera, presidenta de la asociación, así como con la presencia de familiares de víctimas y supervivientes del siniestro.

La titular de Fomento ha valorado el esfuerzo de la representante de las víctimas para mejorar la seguridad de los vuelos y ha afirmado que el Gobierno "seguirá trabajando para aliviar el sufrimiento de las víctimas con hechos, no solo con palabras". En ese sentido Pastor ha recordado que el decreto aprobado en agosto –que contiene el Plan de Asistencia a Víctimas- es "una muestra de la voluntad del Ministerio" y ha anunciado la aprobación del protocolo de coordinación y el comité estatal de apoyo a las víctimas "en los próximos meses" como desarrollo del mencionado decreto.

Pilar Vera, que tuvo un "emocionado recuerdo" para las víctimas del Alvia descarrilado en Santiago el pasado mes de julio, agradeció personalmente la "sensibilidad" mostrada por la actual ministra de Fomento después de "cinco eternos años" en los que las víctimas, en palabras de Vega, han sufrido "un calvario" al no contar "con fuerza ni apoyo de las distintas partes".

La portavoz de las víctimas ha reprochado a la Justicia el archivo de la causa penal –la Audiencia Provincial de Madrid determinó en septiembre que los pilotos, ambos fallecidos, eran los únicos responsables- y subrayó que, aunque no prospere el recurso presentado ante el Tribunal Constitucional y cuya admisión a trámite esperan desde enero, seguirán hasta el final "para obtener el juicio que merecemos".

Respecto a las indemnizaciones Vega ha reiterado que la intención de las víctimas es que Mapfre, la aseguradora que trabajaba para la desaparecida Spanair, "asimile las cuantías, como mínimo, con las de las víctimas del atentado del 11-M". La compañía ofreció en torno a 74.000 euros por pasajero, lejos de los cerca de 800.000 euros recibidos de media por cada víctima del terrorismo. "No puede salir más barato pagar por la vida de los viajeros que invertir en seguridad", ha sentenciado Vera.