Turistas, manténganse alejados de las obras de arte
Un estadounidense rompe el dedo de la estatua de un museo de Florencia cuando se acercó para comparar su mano con la de la escultura
MADRID Actualizado: GuardarComo si de un impulso involuntario se tratara o como si un niño de cinco años le hubiera poseído y le hubiera hecho olvidar la regla de oro de cualquier museo, no acercarse a las obras, un turista estadounidense ha dejado sin dedo a la 'Anunciación de Jesús', del Museo dell'Opera del Duomo de Florencia. El culpable de la amputación se llama Patrick Broderick, trabaja como cirujano en el Hospital de Danbury, en Connecticut, y fue detenido nada más ocurrir el desastre. El personal del museo, que no daba crédito a lo ocurrido, reaccionó rápidamente para evitar que la 'víctima', una escultura de 600 años de edad creada por el florentino Giovanni d'Ambrogio a finales del siglo XIV y principios del XV, sufriera mayores daños.
La intención de Patrick Broderick, que ya ha pedido perdón por lo ocurrido, cuando se acercó a la escultura era comparar su propia mano con la de la estatua. Pero de repente, en cuanto ambas manos se pusieron en contacto, el dedo meñique de la mano derecha de la ‘Anunciación de Jesús’ sufrió una fractura.
Quienes se encontraban en el museo en el fatídico momento recuerdan cómo el guardia de seguridad instó a Broderick varias veces a que no tocara la estatua. Pero los avisos no sirvieron para nada. El personal del museo procedió inmediatamente a retirar el trozo del dedo para evitar que se cayera y se rompiera en pedazos aún más pequeños. Tras unas horas de trabajo, los expertos devolvieron el dedo a su lugar.
No es la primera vez que otros cirujanos, los del museo, tienen que restaurar estas zonas tan frágiles. Pero para el director del centro de exposiciones, Timothy Verdon, cuya escultura más importante es la Piedad florentina (anterior a 1555) de Miguel Ángel, el turista estadounidense "tiene toda la culpa". "Parece que se haya olvidado una de las reglas fundamentales cuando se visita en un museo y es que ¡las obras no se tocan!". Por el momento, no se han presentado cargos contra Broderick ni se ha pedido que pague la reparación.