Biblioteca selecta para estanterías pequeñas

Curiosa y original iniciativa la del congreso La Biblioteca de Occidente en contexto hispánico. Ante la creciente colección de textos electrónicos, los asistentes al evento organizado por la Universidad Internacional de La Rioja, el Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC y Cilengua, han puesto un debate sobre la mesa: ¿Qué libros deberían ser conservados en formato físico en las bibliotecas de los hogares? En este sentido el investigador del CSIC y director del congreso, Miguel Ángel Garrido, apostaba por pocos textos y muy selectos.

El congreso ha inscrito a 110 hispanistas de 35 nacionalidades. El trabajo se ha estructurado en torno a 5 conferencias plenarias y ha contado con 50 ponencias en sesiones simultáneas agrupadas por ejes temáticos o metodológicos. La idea es dar con una colección de 100 libros "presentados en cuidadas ediciones en papel y precedidas de estudios actualizadores de especialistas, que constituirán una biblioteca mínima de culto en la librería familiar", explica Garrido.

De momento ya se ha propuesto un listado, pero es solo una primera tentativa. La propuesta, presentada por el director del congreso, Garrido Gallardo, no es un canon de clásicos, es decir de los libros que le gustaría releer a la persona letrada. Al contrario, es una sugerencia para quienes no los ha leído y a los que se les dice que, aunque pueda haber otras opciones, la presente es buena.

Entre los libros seleccionados hay clásicos de todas las épocas hasta 1961. A saber, 'El coronel no tiene quien le escriba', de Gabriel García Márquez; 'Pedro Páramo', de Juan Rulfo; 'El viejo y el mar', de Ernest Hemingway; 'El Aleph', de Borges; 'La Regenta', de Leopoldo Alas Clarín; 'Obra poética', de Garcilaso de la Vega, y 'La odisea', de Homero. Queda pendiente una biblioteca contemporánea del último medio siglo, que se deja ahora por tratar.