Despedida de récord
El Barça derrota al Málaga, alcanza los 100 puntos y bate sus registros anotadores
BARCELONA Actualizado: GuardarEl campeón de Liga celebró este sábado una gran fiesta para despedirse de Abidal: goleó de manera espectacular al Málaga, conquistó los 100 puntos y batió todos los registros anotadores del equipo azulgrana en un campeonato. La tarde le salió redonda al Barça, que acabó la temporada como deseaba, es decir, igualando el récord del Madrid de Mourinho de la temporada pasada y evitando que la marca obtenida por los merengues figure en los libros del fútbol como único gran hito histórico. Dicho de otra manera, su objetivo, una vez que había conseguido que el enemigo número uno de Can Barça, Mourinho, abandone la Liga sin haber acabado con la supremacía azulgrana, era igualar el gran logro que se lleva el luso de España: la Liga de los 100 puntos. Así, Mourinho tendrá su campeonato centenario, como lo tendrá también Tito, precisamente aquel a quien el técnico de Sétubal despreció, agredió y no supo ni su nombre.
La Liga de Tito será recordada como la de los 100 puntos y como la de los 115 goles, el mayor registro goleador del Barça en un campeonato liguero, aunque no llega a los 121 del Madrid del año pasado. A pesar de los problemas, en su primer año al frente del Barça Tito Vilanova ha superado los números de su anterior jefe, Pep Guardiola, y por derecho propio se ha ganado ya el respeto y la admiración del barcelonismo.
Pero la Liga 2012-13 se rememorará, sobre todo, como la última que jugó Abidal como culé. Tito no le alineó de inicio ante el Málaga, pero cuando en el minuto 75 le hizo saltar al campo el coliseo blaugrana se vino abajo. La afición no ha digerido demasiado bien la marcha del francés y este sábado en su adiós le arropó con mucho cariño. Puesto en pie, el público no ahorró esfuerzos en aplaudir a un jugador que es todo un símbolo de superación. Al final del partido, entre lágrimas, el lateral galo, que ha superado un trasplante de hígado, recibió el homenaje del club, de sus compañeros, de la grada y de su familia. Los gritos de «¡Abi, abi!» sonaron más fuertes que nunca. Sus compañeros le regalaron una camiseta enmarcada, con el número 22, el suyo, y el del vigésimo segundo título liguero de los culés. «Os llevaré en el corazón», respondió Abidal. La fiesta acabó con el francés, como mandan los cánones, manteado.
Con tanta emoción al final, casi lo de menos fue el choque en sí. El Barça se jugaba mucho más en el envite y esta circunstancia se notó enseguida en la intensidad que puso cada uno de los equipos en el partido. El equipo catalán salió a competir, mientras que el andaluz dio la impresión de estar casi de vacaciones. Los de Vilanova, además, tuvieron una salida fulgurante, que les permitió ponerse con un aplastante 3-0 en el primer cuarto de hora. Villa, a pase de Pedro; Cesc, tras una gran pared con Iniesta; y Montoya, de gran disparo desde el borde del área, pusieron el partido muy de cara, y luego se dedicaron a administrar la ventaja. Con los tres goles de ventaja, la intensidad bajó unos cuantos grados y ambos contendientes dejaron pasar los minutos, aunque antes Iniesta y Morales -poco después del descanso- anotaron dos golazos, hasta que llegó el momento de los homenajes y las despedidas.
Primero saltó Thiago, que puede dejar el club, luego Abidal y por último fue sustituido Villa. Su cambio también tuvo un sabor a dulce adiós. El que no jugó fue Valdés, que ya ha anunciado su intención de abandonar el club, si bien aún tiene un año de contrato y su futuro más inmediato es una incógnita. Si finalmente se marcha al Mónaco, como se especula, ya nunca podrá despedirse de la afición azulgrana vestido de corto. Por parte andaluza también dijeron adiós Pellegrini, Demichelis, Joaquín e Isco.
Por parte andaluza, también dijeron adiós Pellegrini, Demichelis, Joaquín o Isco.