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La violencia contra menores crece un 13,6% en 2012

La mayor parte de las agresiones suponen un maltrato físico ejercido por el entorno familiar, según el informe de la Fundación ANAR

MADRID Actualizado: Guardar
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“Lo que oímos cuando los menores nos llaman al teléfono pone los pelos de punta”. Así describe el director general de la Fundación ANAR, Tomás Lagunas, las tremendas historias de maltrato, agresiones físicas y abusos sexuales que los niños les cuentan y que en su mayoría proceden del entorno familiar. Y no son historias aisladas. Esta asociación recibió el año pasado 324.643 llamas, lo que supone un 67% más que en 2011. De estas llamadas 428 requirieron una intervención urgente por tratarse de situaciones “graves” para lo niños, según los datos del Informe Anar 2012 conocido este jueves con motivo del día Internacional de la Lucha contra el Maltrato Infantil.

El año pasado la fundación atendió a 1.778 niños y adolescentes víctimas de la violencia, lo que supone un incremento del 13,6% respecto a 2011. La mayor parte se trataba de un maltrato físico (28,7%), seguida de la violencia escolar (15,5%), el maltrato psicológico (14,7%), abandono (12,4%), abuso sexual (11,5%), agresiones extra familiares (7,6%), violencia de género (6,9%), y el ciberacoso (1,5%).

Pero uno de los aspectos más preocupantes es que el agresor en la mayoría de los casos son los progenitores. En concreto, en un 22,5% quien ejerce la violencia es el padre, en un 15,5% la madre o ambos progenitores en un 6,3%. “Las personas que deberían protegerles y cuidarles son quienes ejercen la violencia contra ellos”, ha lamentado Benjamín Ballesteros, director de programas AMAR.

Sin embargo, después de la familia es el ámbito escolar el segundo escenario donde los menores sufren más violencia (18,4%). Ballesteros también ha destacado que uno de los datos más preocupantes es que el 43,5% los menores atendidos ha sufrido algún tipo de violencia durante más de un año y un 46% de forma diaria.

Uno de los principales problemas es que los menores se acostumbran a esta violencia y guardan silencio. Y es en ese punto donde entra en juego ANAR que facilita un número de teléfono a los menores (900 20 20 10) totalmente gratuito y confidencial para que puedan contar sus problemas. “Las llamadas son atendidas por psicólogos profesionales”, ha explicado Lagunas.