Tello lidera a los suplentes al Barça
Los azulgrana derrotan al Zaragoza y ya hacen números sobre cuándo serán campeones
Actualizado: GuardarCon una victoria bastante cómoda, a pesar de que el Zaragoza se jugaba la vida, el Barça dio este domingo un paso de gigante hacia el título de Liga, que acaricia ya con las yemas de los dedos. A falta de siete partidos, nadie duda de que el Barça será campeón. Si acaso, la incógnita que le queda al campeonato es saber cuándo podrán cantar el alirón los hombres de Tito Vilanova. En 'Can Barça' han sacado ya la calculadora y ésta les arroja un resultado muy favorable: con dos o tres victorias más podrían levantar la copa del vigésimo segundo campeonato liguero en la historia azulgrana. Y es que, hace tiempo que la liga 2012-2013 perdió la emoción por la disputa del título. Da igual que el Barça deje a media plantilla en casa, descansando de cara a la batalla de Baviera, o que solo ponga en liza tres titulares; el fondo de armario le da para sacar adelante partidos que en principio se presentan complicados, como el de La Romareda.
Pero este Zaragoza está herido de muerte. No conoce el triunfo desde el mes de diciembre y poco a poco se va descolgando y ve cómo se hunde de manera inevitable hacia la segunda división. Los maños, a los que se esperaba que plantearan un choque más visceral, más físico, no pudieron hacer nada ante un Barça que únicamente jugó con Valdés, Alves y Xavi del teórico once ideal. Eso sí, los no habituales, que asumirán el peso del final de curso liguero, hicieron un partido muy solvente, muy serio y eficaz. Sobre todo Thiago y Tello, acostumbrados a no ser protagonistas, pero que ante la falta de Messi, Pedro o Iniesta, asumieron la responsabilidad y firmaron un gran partido. El extremo hizo dos tantos, el hispano-brasileño marcó el tercero y dio un recital de pases y paredes.
La tarde, por tanto, le salió redonda a Tito Vilanova, porque por un lado pudo dar descanso a sus jugadores más importantes (Iniesta, Jordi Alba, Messi, Puyol y Mascherano se quedaron en Barcelona) y Villa, Pedro y Piqué se sentaron en el banquillo de La Romareda, pero además no perdió potencial y presentó un equipo muy competitivo, que tenía ganas de agradar y de sentirse importante. Destacaron en esta faceta, Tello, Alexis y Cesc, que formaron la tripleta atacante, que a la postre resultó muy efectiva, especialmente por las bandas, donde el extremo de Tarragona y el chileno entraron con excesiva comodidad. Thiago, que se sentía cómodo con Xavi y Song de escuderos de lujo, estuvo muy inspirado y se puso las botas de surtir balones a sus delanteros. El hijo de Mazinho se aprovechó de que Fàbregas interpreta muy bien su posición de falso ariete, porque cae a banda y baja a recibir a la medular, lo que descoloca a los centrales, que se pierden sin una referencia fija y dejan zonas desprotegidas.
Los tres tantos azulgrana, dos de ellos en la primera parte, y el tercero, poco después del descanso, pusieron en evidencia los problemas maños en defensa. Sapunaru tuvo pesadillas con Tello y Loovens, muy criticado por la hinchada, estuvo todo el rato fuera de sitio. Además, el conjunto aragonés, que de la mano de Manolo Jiménez tenía fama y sello de aguerrido, apenas tuvo mordiente ante el Barça. La presión no les funcionó y en ataque no lograron disparar ni una sola vez sobre la meta de Valdés. Con un bagaje tan pobre, al público se le vio hasta resignado. Y eso que el Barça llevaba dos meses sin ganar como visitante (perdió en el Bernabéu y empató en Balaídos en sus dos últimas salidas). A partir de ahora, al Barça le quedan siete etapas: Levante, Athletic, Betis, Atlético, Valladolid, Espanyol y Málaga. Los culés más optimistas esperan que a la liga le sobren cuatro o cinco partidos.