El Gobierno revisará el mercado mayorista de la electricidad para adaptarlo a la sobreoferta actual
Los cambios en el ‘pool’, que es el que actualmente fija el precio final de la luz, se enmarcan en la reforma energética global que prepara el Ejecutivo
MADRID Actualizado: GuardarEl ministerio de Industria revisará el mercado mayorista de la electricidad (conocido como ‘pool’ en términos del sector) para adaptarlo a la actual situación de sobreoferta, según ha avanzado el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal. El sistema de ‘pool’, vigente desde el año 1998, es el que en la actualidad determina el coste final de la luz para los usuarios, ya que el Gobierno mantiene una política de contención de los costes regulados del sistema, que son los que marcan la mitad de la factura eléctrica.
Nadal, que ha participado en la inauguración de las jornadas ‘Asuntos claves de la energía en Europa’ organizadas por el Club Español de la Energía (Enerclub), recuerda que “todas las partes del sistema energético están siendo revisadas”, y en ese marco de actuación se engloba la reforma del mercado mayorista de la electricidad.
El secretario de Estado aclaró que no se alterarán los principios que forman los precios de la electricidad en el mercado -la última tecnología en entrar en la subasta, que es la más cara, seguirá dando la señal de precios del conjunto de fuentes de generación-, pero sí se adaptará a la demanda actual de energía, muy inferior a la capacidad de producción que presentan las compañías del sector.
El secretario de Estado precisó que algunos de estos cambios previstos en el sistema energético se llevarán a cabo “en breve”, pero que se completarán “con actuaciones posteriores”. El Gobierno ha manifestado recientemente su intención de aprobar el nuevo paquete de medidas -probablemente como proyecto de ley- antes de julio y que, tras su tramitación parlamentaria, entre en vigor en otoño.
Durante su discurso de inauguración de las jornadas, Nadal ha insistido en la necesidad de avanzar en la interconexión eléctrica de los países para consolidar un verdadero “mercado único de la electricidad”. Un objetivo que, a su juicio, también precisa de una regulación comunitaria “más flexible” capaz de adaptarse “a los cambios, cada vez más rápidos” que se producen en el sector de la energía. “Europa es, al igual que en otros casos, un transatlántico que avanza, pero muy lento”, ha asegurado.