«Garantizar los depósitos es un principio irrevocable»
Rajoy y Hollande se desmarcan del líder del Eurogrupo: "El problema chipriota es excepcional" | El presidente español pide a ETA que deje las armas y evita dar respuestas sobre Bárcenas
MADRID Actualizado: GuardarEl jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente francés, François Hollande, han marcado las distancias con las declaraciones del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, que hicieron virar ayer a rojo las bolsas europeas al afirmar que la fórmula aplicada en Chipre -que contempla que los ahorradores con más de 100.000 euros asuman parte del coste del rescate- era exportable a otros países de la Unión Europea. En la rueda de prensa ofrecida tras su reunión en El Elíseo, Rajoy y Hollande han coincidido en asegurar que la situación de Chipre es "única y excepcional" y que no marca la senda para futuras intervenciones.
"El problema del sector bancario europeo de Chipre es distinto al del resto de la UE", ha insistido Rajoy, que ha instado a "ser prudente" a la hora de hacer declaraciones. El líder del Ejecutivo español ha defendido que "si la unión bancaria fuera ya una realidad, no hubiéramos pasado por los problemas que hemos tenido en las últimas horas" y ha recordado que "la unión bancaria ya estaba pactada" en las instituciones de la UE. Asimismo, ha defendido los planes de recapitalación bancaria por medio del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y ha asegurado que nunca apoyará la recapitación bancaria por medio de los depósitos. "Garantizar los depósitos es un principio irrevocable", han coincidido en destacar ambos líderes.
Preguntado por las previsiones de crecimiento a la baja que ha dado a conocer el Banco de España, Rajoy ha recordado que el Ejecutivo ya avanzó su intención de "revisar las previsiones económicas" a la hora de remitir a la UE el plan de estabilidad y crecimiento para 2013. Asimismo, ha destacado que "la competitividad de la economía española ha mejorado mucho", una dato "importante" porque "estamos hablando de progreso y empleo", ha señalado en referencia a la reforma laboral.
ETA y el 'escrache'
A preguntas de los periodistas, Rajoy se ha referido también al comunicado de ETA en el que la banda terrorista ha anunciado "consecuencias negativas" tras el rechazo del Gobierno a negociar y ha señalado que "las consecuencias positivas solo serán cuando ETA anuncie su dislución definitiva".
El presidente del Gobierno ha condenado asimismo las prácticas de señalamiento de los miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca con algunos diputados del PP, que han denunciado a la plataforma por "acoso". "No es serio que se acose a personas y que se empapelen sus casas", ha defendido Rajoy, que ha tachado el método utilizado por la plataforma -conocido como 'escrache'- de "profundamente antidemocrático" porque, ha señalado, "un valor básico es respetar a aquellos que no piensan como tú". Asimismo, Rajoy ha recordado que su Gobierno es "el primero y el único que ha tomado decisiones en esta materia", en referencia al drama de los desahucios.
Y después... al fútbol
Rajoy ha llegado al Palacio del Elíseo a las 18:30 hora local (17.30 GMT), donde fue recibido al pie de la escalinata del patio por Hollande, con quien posó ante los fotógrafos antes de comenzar la reunión. ambos líderes han analizado durante alrededor de una hora la respuesta dada por la Unión Europea a la situación en Chipre y las últimas decisiones que se han ido adoptando en Europa para hacer frente de forma general a la crisis.
En política internacional, los líderes han departido sobre la situación en Siria y en Mali, país en el que Francia puso en marcha el pasado 11 de enero la operación 'Serval' contra los grupos salafistas que dominaban el norte del país. En apoyo de esa operación francesa, España ha enviado un avión Hércules con medio de centenar de militares, al tiempo que se ha comprometido a desplegar 54 efectivos dentro de la misión EUTM-Mali de formación del Ejército de Mali.
Tras la rueda de prensa conjunta, ambos líderes se han trasladado hasta el estadio de Saint Denis para asistir al partido de fútbol clasificatorio para el Mundial de Brasil del próximo año y que enfrentará a las selecciones de España y Francia.