Un clásico menor e inoportuno
Con la Liga sentenciada y la mente en Old Trafford, las rotaciones marcan el intrascendente partido del Bernabéu, con el Barça favorito, aun sin el lesionado Xavi, que llegará muy justo contra el Milan
MADRID Actualizado: GuardarA tres días de un partido vital en Old Trafford, con la Liga sentenciada y cuando aún escuecen en el Barcelona los rescoldos del incendio del Camp Nou provocado por el Real Madrid en la Copa, llega un clásico más entre los eternos rivales, pero en este caso, menor e inoportuno. El sexto de la temporada, a una hora nada habitual, y con escasa, por no decir nula trascendencia, porque aunque está en juego el orgullo de ambos, este derbi se presenta como el más irrelevante del último lustro.
Aunque el Madrid pudiera agravar la situación de los azulgrana tras dar un golpe de KO en el Camp Nou, al equipo de José Mourinho ni siquiera le debe importar ya demasiado el resultado frente a un Barça que, con el título asegurado, afronta también lo que se podría denominar un trámite liguero. Aunque el Barcelona ve la visita al Bernabéu como una oportunidad de revancha, para levantarse del duro golpe recibido cuatro días antes, los azulgrana tampoco afrontan con verdadero interés este clásico venido a menos.
Con la mente del Madrid puesta exclusivamente en Manchester, aunque una nueva victoria frente a los catalanes daría más alas a los blancos, en este enfrentamiento tan poco relevante también se echarán en falta a varias de las grandes estrellas. Lo más probable es que Cristiano Ronaldo sea suplente para no arriesgarse a una lesión y Xabi Alonso y Özil serán otras dos de las piezas básicas del Madrid que tendrán descanso, por lo que el alemán cederá su puesto al ‘resucitado’ Kaká en la mediapunta.
Por parte azulgrana no faltará Messi, que lleva 15 jornadas consecutivas marcando, pero Xavi será baja a causa de una rotura en el bíceps femoral de la pierna derecha y, dado que estará entre diez días y dos semanas de baja, llegará muy justo al crucial choque contra el Milan. Al igual que Mourinho prescindirá de habituales, ya que reservar es imprescindible, porque la verdadera trascendencia de toda la temporada para el Madrid está en Old Trafford, Jordi Roura también se plantea rotaciones, aunque algunas de ellas son obligadas, y preocupantes, como la de Xavi.
Al Madrid le resulta incluso molesto tener que enfrentarse de nuevo al Barcelona cuando su única preocupación es la ‘Champions’, y al Barcelona también le supone un contratiempo, porque aunque tenga ansias de venganza tras el 1-3 copero, los azulgrana tienen bastante más que perder que ganar. Con los blancos desconectados de la Liga y, por mucho que un clásico siempre sea un incentivo de motivación, es el Barça, pese a sus 16 puntos de ventaja, el que precisa una reacción para no complicar su situación. Por ello, en esta ocasión los favoritos son los azulgrana.
Prueba psicológica
Esta prueba es más psicológica que deportiva para el Madrid con vistas a Manchester, aunque Kaká y los suplentes que han perdido crédito, caso de Benzema, consideren este choque una ocasión para resarcirse y reivindicarse ante Mourinho. «Para llegar bien a Manchester es importante ganar el clásico», apunta Kaká, aunque la cabeza y el cuerpo de los madridistas estarán puestos en ese envite europeo que servirá para mantener viva la llama de la ‘décima’, lo único que salvará la temporada, o enterrará de forma definitiva las esperanzas de un equipo ahora relanzado, pese a sus muchos problemas para crear fútbol ante rivales que se encierran. No será el caso del Barcelona, ante el que el Madrid ya se ha sacudido todos los complejos que le acogotaban y mira desde hace tiempo al enemigo de tú a tú, e incluso por encima.
Sin embargo, la reciente derrota sufrida por el Barça ante los blancos y, sobre todo, la forma en que se produjo, con una lección táctica, física y mental de los de Mourinho al conjunto del cuestionado Roura, ha dejado tan tocados a los azulgrana que, cuando aún faltan diez días para el crucial enfrentamiento frente al Milan, se agarran a clásico tan raro para intentar levantar la cabeza y pulir defectos defensivos. Porque los fallos atrás son tan recurrentes esta temporada que son ya 12 partidos oficiales consecutivos los que llevan los azulgrana encajando goles. Una barbaridad para un equipo que, aparte de caminar sin oposición hacia la corona liguera, también aspira a batir este año el récord de puntos y goles -éste más factible- que firmaron los blancos la pasada campaña.
La mente del Barça también está puesta en Tito Vilanova, a quien echa muy en falta el equipo y, por supuesto, su íntimo Jordi Roura, emocionado al referirse al primer entrenador que continúa en Nueva York. «Tito está muy bien, muy animado, continúa su tratamiento y tenemos confianza en su rápida recuperación», comentó con la voz entrecortada el ahora técnico interino, que promete un equipo «competitivo» juegue quien juegue en el Bernabéu. Se prevén al menos cuatro cambios con respecto al once que cayó el martes, cuando aparte de Xavi, Messi también firmó un partido pésimo, aunque según Roura, «que Leo no marque en un partido es anecdótico». En el caso del Madrid se espera una alineación similar a la de Riazor, con mezcla de fijos y suplentes, que son los que pide la afición blanca para este choque sin valor, porque el que sí era muy importante era el de Copa, y aún lo será más el de Old Trafford.
Alineaciones probables
Real Madrid: Diego López, Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo, Essien, Khedira, Modric, Kaká, Callejón y Benzema.
Barcelona: Valdés, Alves, Piqué, Mascherano, Adriano, Song, Tiago, Iniesta, Alexis, Messi y Villa.
Árbitro: Pérez Lasa (Vasco).
Estadio y horario: Santiago Bernabéu. 16.00 h. (Canal+1).