La burbuja inmobiliaria en China se infla un poco más
La Oficina de Estadística señala que el precio de la vivienda nueva creció en 53 ciudades el mes pasado | La cifra genera mayor presión sobre las autoridades para que aprueben medidas de control
PEKÍN Actualizado: GuardarEl precio de las viviendas nuevas se incrementó en enero de 2013 en un 4,7 % interanual en 53 ciudades chinas de un total de 70 analizadas, informó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE). Ello continúa la tendencia al alza, tras las subidas de diciembre en 54 de 70 ciudades, y aumenta la presión sobre las autoridades chinas para continuar medidas de control sobre el valor de las propiedades que frenen una temida burbuja inmobiliaria.
Se trata del cuarto mes consecutivo de subidas ininterrumpidas en los precios de la vivienda desde octubre, tras el enfriamiento de los primeros meses de 2012. Desde 2010 el país impone diversas medidas nacionales para devolver los enormes costes de la vivienda a un nivel razonable y frenar una temida burbuja inmobiliaria.
Las cifras publicadas hoy indican además que el incremento del precio de las viviendas nuevas en importantes urbes como las de Pekín (2,1%), Shanghái (1,3%), Cantón, un 2%, y Shenzhen, un 2,2%, respectivamente, marcaron un ritmo de crecimiento más rápido que el registrado el mes anterior. También se mencionó que el incremento de precios en Cantón fue el más alto registrado interanual, un 4,7%, mientras que el de las viviendas de Wenzhou fue el más bajo: un 10,1% interanual.
En 2012, la economía china registró su menor expansión en una década, al crecer un 7,8%, aunque el repunte del 7,9% del último trimestre allana el camino para consolidar la recuperación durante este año. Pese a que el dato está muy por debajo del 9,3% de crecimiento que la segunda economía mundial registró en 2011, y aún más lejano del 10,4% alcanzado en 2010, se encuentra por encima del 7,5% fijado por el régimen comunista en marzo del pasado año. El aumento del 7,9% a ritmo anual registrado en el último trimestre rompe la dinámica de declive de los siete trimestres previos, un repunte que la Oficina adjudica a las medidas de estímulo dictaminadas por el Gobierno durante 2012