El juez imputa al secretario de las infantas
Carlos García Revenga, que fue tesorero del instituto, declarará el próximo 23 de febrero, el mismo día que Urdangarin
MADRID Actualizado: GuardarEl juez José Castro ha imputado a Carlos García Revenga, secretario de las infantas Elena y Cristina de Borbón, en el 'caso Nóos'. El titular del juzgado de instrucción número 3 de Palma de Mallorca le ha citado para declarar el 23 de febrero, después de que lo haga Iñaki Urdangarin, que será interrogado el mismo día.
Castro quiere conocer el cargo y funciones que tenía García Revenga en el instituto Nóos, en el que se desempeñó como tesorero, o en cualquiera de las entidades mercantiles del entorno de Urdangarin. El juez pretende esclarecer asimismo qué labores de asesoramiento prestaba al duque de Palma y su esposa y si tenía conocimiento de las actividades de la organización.
García Revenga, de todos modos, había pedido declarar ante el juez tras la difusión la semana pasada de una serie de correos electrónicos por parte de Diego Torres, exsocio del duque de Palma, en los que se ponía de manifiesto la estrecha relación entre el secretario de las infantas y el yerno del Rey.
El juez ha tomado la decisión de citar a Revenga de oficio sin que haya pedido ninguna de las partes personadas y sin tomar en cuenta la petición del propio afectado.
Emails comprometidos
En esos ‘emails’ Revenga daba instrucciones a Urdangarin sobre la cuenta de Cristina de Borbón en la que se debían hacer determinados pagos, entre otras cuestiones. Tras conocerse esos correos, el secretario de las infantas difundió un comunicado en el que defendía su inocencia respecto a los negocios del yerno del Rey y pedía al juez que le llamara a declarar. García Revenga admitía en ese comunicado que “en ocasiones” pudo mezclar “gestiones propias” con “actividades privadas de los Duques de Palma”.
García Revenga pese a haber sido tesorero del instituto Nóos, aseguró que “nunca tuve firma autorizada en sus cuentas, ni poder decisión en la gestión de las mismas ni en su contabilidad”, decía en su escrito.
Tras la difusión de los correos de Torres la imputación judicial del alto cargo de la Zarzuela era cuestión de días, con independencia de que el interesado hubiera solicitado declarar, según fuentes conocedoras de la investigación.