Someterse a las bajas temperaturar incrementa el gasto cardíaco, eleva el gasto energético y alisa la celulitis. / GTRES.
EN FORMA

El poder del frío

Destemplarse un momento, sin llegar a tiritar, puede ser lo que tu salud necesita

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Nuestro organismo tiene dos tipos de temperatura: una superficial y otra profunda. Cuando el cuerpo siente frío, y no le basta para combatirlo con ponernos la piel de gallina, lo combate produciendo una vasoconstricción de los vasos periféricos y conduciendo la sangre “sobrante” al interior. Provocar este cambio en un tiempo récord es el objetivo de la criosauna, una cabina en la que se expone al cuerpo a muy bajas temperaturas (-­1100 C y -­1900 C) durante un periodo de uno a tres minutos.

“El frío de la criosauna sirve para muchas cosas. La primera es que incrementa el gasto cardíaco la cantidad de sangre que moviliza el corazón, pero sin provocar un sobreesfuerzo. La segunda es que eleva el gasto energético, primero de glucosa y glucógeno y, finalmente, de grasa, lo que “alisa” la celulitis”, dice Jordi Riba, fisioterapeuta, nutiricionista y preparador físico, que emplea en su consulta esta técnica. (Más información en MujerHoy.com)