Rubalcaba: «Seguiré hasta el final»
El líder del PSOE comparece hoy en Ferraz para dar su visión sobre el retroceso socialista | Ante la incetidumbre generada, opta por activar el comité de expertos sobre el modelo de Estado
MADRID Actualizado: Guardar"Voy a seguir hasta el final". "Inequívocamente, sí". Y el final es 2016, cuando concluye su mandato como secretario general del PSOE. Alfredo Pérez Rubalcaba ha afirmado que "ni se le ha pasado por la cabeza" dimitir de su cargo por los resultados electorales del País Vasco y Galicia. Es más, ha asegurado que "nadie" le ha pedido que se vaya, y eso que ha hablado con todos los secretarios generales del partido.
Setenta y dos horas después de las elecciones vascas y gallegas, Rubalcaba ha hablado. No tenía previsto hacerlo hasta el próximo después, después de la reunión de la comisión ejecutiva, pero el guirigay que ha organizado en el PSOE le ha hecho cambiar de planes. No ha comparecido en la sede federal de la calle Ferraz sino en la sala de prensa del Congreso con la excusa de que iba a valorar los Presupuestos. Nadie le ha preguntado sobre las cuentas públicas, pero sí, y mucho, sobre su situación y la de su partido tras los dos varapalos electorales.
Rubalcaba ha repetido media docena de veces que ni se le ha ocurrido irse y ha garantizado que seguirá al frente del PSOE, cargo para el que fue elegido hace ocho meses, en los próximos cuatro años. "Soy partidario de cumplir los mandatos", ha precisado. El hecho de que no se plantee la dimisión no significa que no haya reflexionado "mucho" sobre lo ocurrido el pasado domingo en Galicia y Euskadi. Unos resultados que, por lo demás, no quitan demasiado el sueño al secretario general del PSOE, que calificó de "aceptables" los del País Vasco y de previsibles los de Galicia.
En el caso de los comicios vascos ha lamentado que los ciudadanos no hayan valorado en las urnas "la magnífica gestión" de Patxi López, una tarea que "la historia reconocerá". Sobre el futuro político del ya lehendakari en funciones ha sido ambiguo porque, por una parte, ha apuntado que debe liderar la oposición en el Parlamento de Vitoria y, por otra, ha señalado que estará "encantado". de tenerlo a su lado en Madrid. López, en resumen, "decidirá cómo distribuye sus tareas".
El problema, el electorado
En el caso de las elecciones en Galicia, para Rubalcaba el problema ha sido que el electorado, aunque en su mayoría quería un cambio, no ha sabido ver que existía un proyecto alternativo al del popular Alberto Núñez Feijóo. Ese es el problema tanto en Galicia como en el resto de España, que los ciudadanos no ven el PSOE una alternativa al PP.
De vuelta a los asuntos internos, el líder socialista se escabulló una y otra vez sobre el calendario para las elecciones primarias que deben elegir el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno. "No toca y cuando toque se hará", ha dicho cuantas veces ha sido interrogado por el asunto. Sería una "irresponsabilidad", ha añadido, que los socialistas se enredasen ahora en ese debate. Y al hilo de esta reflexión ha aprovechado para dar un toque a los dirigentes socialistas que "a través de los teletipos", y "no cara a cara", plantean cambios de rumbo político o el relevo de dirigentes. Rubalcaba ha animado a sus críticos a exponer de frente sus objeciones y no escudarse en los medios de comunicación para plantear sus divergencias.
También ha reconocido que su estrategia de oposición va a sufrir cambios porque el PSOE necesita ser creíble como alternativa al Gobierno y, además, el Ejecutivo "ha achicado los espacios y el tiempo" para alcanzar acuerdos de Estado, que sería, a su juicio, lo deseable. Los socialistas, ha resumido, van a meter "el turbo" a su oposición.