El Atlético sigue lanzado

El Atlético sigue en un gran momento de forma, frotándose los ojos en este espectacular inicio de temporada. Muy superior al Málaga, tuvo que esperar otra vez al final para sumar una merecida victoria y convertirse en colíder de la Liga. Ya lleva 19 partidos consecutivos sin perder y frente al Málaga sumó su sexto triunfo consecutivo en la Liga ante un Málaga que también acumulaba una gran racha como invicto -once encuentros sin conocer la derrota-. El ‘Atleti’ está lanzado, y volvió a demostrar que con su ambición, el poderío físico y el ritmo que impone en los partidos está capacitado para confirmarse como una alternativa al duopolio Barça-Madrid. Con los azulgrana está empatado a puntos, y a los blancos ahora les saca ocho. Una cifra impensable para este Atlético que parece estar preparado para luchar por el título. Porque la suerte también ha cambiado para este ‘Atleti’.

Reapareció Falcao y el ‘Tigre’ volvió a marcar, por partida doble, para permitir al Atlético sumar tres puntos más en un choque que refuerza aún más la autoestima ‘colchonera’. El dominio rojiblanco no pudo verse reflejado en un triunfo hasta el último minuto porque lo impidió Santa Cruz, con la colaboración de Courtois, en una de las escasas ocasiones de las que dispuso el Málaga en todo el partido. El Atlético, sin embargo, no dejó de intentarlo hasta el pitido final, y encontró su premio en una acción a balón parado cuando el Málaga ya celebraba un punto sin apenas haber tenido juego ni oportunidades.

La mentalidad que ha inculcado Simeone a unos jugadores que, en vez de sufrir parecen disfrutar con la presión al contrario, ha permitido que este Atlético se haya encaramado a lo alto de la clasificación. Y no solo por los goles de Falcao, que ya lleva nueve en este arranque de Liga, uno más que Messi y Cristiano, sino por el equilibrio en el medio campo, la agresividad y la vertiginosa velocidad de su ataque. La primera media hora del Atlético fue arrolladora, pero el Málaga fue capaz de aprovechar poco después la única oportunidad de la que dispuso para empatar un choque que siempre tuvo color rojiblanco.

Fue un dominio cómodo del Atlético durante toda la primera parte, pero a los de Simeone les faltó entonces gol. La efectividad fue del Málaga, al que los rojiblancos no permitieron desplegar su mejor fútbol. La presión y disciplina táctica del ‘Atleti’ impidió que Isco entrase en juego y los de Pellegrini practicasen su juego habitual. Salvo en ese ‘accidente’ fabricado por una internada de Monreal y un cabezazo de Santa Cruz, el Atlético vivió relativamente cómodo atrás y apenas sufrió. Al contrario que el Málaga, agobiado durante casi todo el encuentro por el buen juego de ataque y el incansable empuje rojiblanco, abriendo el juego por bandas y con Falcao siempre preparado para cazar la pieza en el área.

Al igual que el de Monreal, también fue genial la asistencia de Emre a Falcao y el remate en plancha del colombiano, aunque el ‘Tigre’ se vio después bien sujetado por la defensa liderada por Demichelis. Hasta que llegó esa puntera del ‘Tigre’ que sentenció la victoria por la que luchó hasta el último momento. Ni siquiera acusó el cansancio al final después de tantísimo esfuerzo. Este Atlético es poderoso física, y mentalmente.