Algo pasa con Messi

El Barcelona sufrió más de la cuenta anoche para ganar al modesto Granada en casa. Los de Vilanova lograron los dos goles de la victoria a escasos minutos del final y lo celebraron con rabia. Sin embargo, la imagen del partido fue la de un Messi enfadado. El astro argentino tiene carácter y vaya carácter, que dirían algunos. Anoche el blanco de sus iras fue su compañero David Villa.

Los rumores ya apuntaban a que el internacional español y el argentino no se llevan excesivamente bien. Y aunque desde el club tratan de desmentirlo, lo que ayer pasó en el campo al filo del descanso alimenta la 'leyenda'. Messi bajó metros para conducir el balón y armar un ataque. En su intento, le pasó el balón a Villa, de quien esperaba un pase rápido. Sin embargo, el asturiano se lo devolvió tarde y el argentino no pudo más.

"¡A la primera, a la primera!", le gritó Leo a su compañero. Al parecer, su intención era armar una pared con el exvalencianista y disparar, pero no lo consiguió . "Si no he podido controlarlo, no me jodas", respondió Villa, que tampoco disimuló su malestar. Poco después del encontronazo, el árbitro pitó el final de la primera parte y se fueron al vestuario.

La cosa se quedaría en una mera anécdota sino fuera porque Messi ya ha protagonizado varias escenas de este tipo y no solo con el asturiano. De hecho, anoche también recriminó una acción al chileno Alexis y la pasada temporada abroncó al canterano Tello en un partido de la Liga de Campeones contra el Milán en San Siro.

No obstante, el argentino goza con el cariño del club y de su técnico. Anoche, tras el partido y a preguntas de los periodistas, Tito Vilanova no le dio importancia al rifirrafe entre sus jugadores. "Forma parte del fútbol. No es discutir, esto a mí me da la sensación de que es un equipo vivo con ganas de seguir ganando", subrayó.

Messi también habló de ello, aunque con Barça TV, y señaló que son "situaciones normales": "Nos calentamos, nos enojamos y por eso reaccionamos de esa manera. No hay ningún problema con el Guaje, al contrario", se sinceró. Y aprovechó para lanzar un mensaje a algunos: "Que no busquen problemas donde no los hay. Villa y yo nos llevamos muy bien".