El Málaga ya divisa la Liga de Campeones

Los malagueños ya ‘huelen’ la Liga de Campeones. Con un triunfo cómodo, sin fisuras en su juego, Pellegrini logró darles serenidad a sus jugadores en mitad de la tempestad extradeportiva. No tuvieron problemas los blanquiazules para batir a un Panathinaikos insulto y frío en su sistema ofensivo. Los griegos terminaron dando las gracias por el resultado, ya que pudo haber sido más abultado.

Comenzó el Málaga el encuentro sabedor de lo que se jugaba. Más allá del prestigio de estar en la fase de grupos, había que ganar para lograr los ingresos que un pase a ese nivel ofrece. A pesar de las deudas del club, los jugadores pensaron más con la cabeza que con el corazón. De ahí que a los quince minutos ya se adelantaran tras una jugada a balón parado. A la salida de un córner, Demichelis aprovechó la dejadez defensiva griega para marcar a placer. Pasaba por allí el argentino y decidió que era buen momento para tranquilizar los nervios.

Con el uno a cero ya a su favor, los malaguistas empezar a quitarse de encima la falta de experiencia en estas situaciones de algunos de sus hombres. Como era el caso de Frabrice, el joven nuevo valor de la cantera, quien empezó a dar quebraderos de cabeza a los rivales. De una presión suya llegó el segundo tanto para los locales. Isco recogió una pelota en el lateral, penetró con frescura y apoyándose en un taconazo de Maresca pasó para que Eliseu marcara. La verticalidad de los de la Costa del Sol avasallaba a los jugadores contrarios.

El bonito tanto en conjunto dio pasó a una segunda mitad neutra, en la que el Panathinaikos quiso despertar. Jesualdo Ferreira decidió hacer algunos cambios tácticos para intentar al menos darle honor a los suyos para la vuelta. El resultado fue desolador para los intereses helenos. Isco y Maresca tuvieron ocasiones para aumentar la goleada, pero no era el día de ninguno. Sí era el de Fabrice. A pesar de sus 16 años el desparpajo demostrado dejó sin respiración a los visitantes. Hasta tres ocasiones claras tuvo para estrenarse también en ‘Champions’ el espigado delantero.

A pesar de la clara superioridad española, el resultado se antoja corto para los méritos de unos y otros. Un 2-0, buenas vibraciones y tranquilidad es lo que deja la ida de la previa para el Málaga. Deberá rematar en la vuelta en el Spyros Louis. De momento, el destino final de la Liga de Campeones parece estar más cerca para los malacitanos. Toca esperar.