GUÍA DE ENFERMEDADES

¿Por qué no puedo dejar de fumar?

El efecto que produce la nicotina en el cerebro, la genética y el miedo a engordar hacen que nos cueste abandonar el tabaco para siempre

MADRID Actualizado: Guardar
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"De hoy no pasa: voy a dejar de fumar". ¿Cuántas veces te has repetido esta frase? Pero la realidad es que es más sencillo decirlo que hacerlo y que la cifra de adictos a la nicotina en España sigue siendo elevada. El 32,9% de los hombres de 15 a 64 años y el 26,6% de las mujeres fuman cada día. ¿Lo más preocupante? Que la cifra de fumadoras aumenta año a año. Y que el panorama no parece que vaya a mejorar. De hecho, un estudio de la Comunidad de Madrid confirma que la cifra de féminas que dejan de fumar es inferior a la de hombres: el 25,8% frente a 19,8%. Cifras que ratifica el dr. José Miguel Rodríguez, del servicio de Neumología del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid: "Las mujeres cercanas a los 40 años tienden a dejar el tabaco en menor proporción que los varones de la misma edad. A su vez, las adolescentes empiezan a fumar casi en un 50% más que sus coetáneos varones. Esto hace que en determinados grupos de edad, fumar haya pasado a ser una actividad femenina".

El último cigarrillo

En tu caso, como en el de la mayoría de las fumadoras, seguro que esta no es la primera vez que te planteas abandonar el tabaco. Pero, ¿por qué nos cuesta tanto decirle adiós al cigarrillo? Hasta ahora se consideraba a la nicotina la responsable de ese enganche. Al fumar, esta sustancia es absorbida por los pulmones y de ahí se distribuye por el resto del cuerpo hasta llegar al cerebro. Una vez en él, provoca la liberación de unas sustancias que provocan un aumento de la concentración, el relax y el placer. ¿Y qué ocurre después? Que cuando la nicotina desaparece, el organismo vuelve a requerirla para sentirse bien.

(Más información en: MujerHoy.com)