EDUCACIÓN | ORIGINAL INICIATIVA

Dulce maestra

Una profesora en paro recurre a un original vídeo-currículum en el que explica sus virtudes docentes mientras cocina galletas | El vídeo de Nuria Fusté triunfa en Youtube y en una semana ha superado las 35.000 visitas

MADRID Actualizado: Guardar
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El pasado 25 de junio Nuria Fusté, una joven de 38 años, madre de dos hijos, de 4 años y 20 meses, recibió una mala noticia. Perdía su trabajo como maestra en la escuela Laia, un pequeño colegio concertado de Barcelona que ha acabado cerrando sus puertas. Desde hace tres lustros, Nuria, profesora de Secundaria, enseñaba ciencias a alumnos de 12 a 16 años en sus modalidades de biología, física, química, geología y nutrición. Licenciada en Biología, su vocación siempre fue la docencia. “Me hice bióloga para poder enseñar”, cuenta. Por las mismas fechas en que la directora del centro le comunicó el cierre de la escuela por problemas de financiación, Nuria, que además de maestra es una excelente repostera de galletas y pastas, tuvo que pasar largas horas en un hospital de Barcelona acompañando a su madre que se recuperaba de una operación.

Tanto tiempo entre salas de espera y habitaciones silenciosas le permitió pensar en una idea que le ayudara a desterrar esa angustiosa sensación de querer trabajar, estar preparado para ello y no poder hacerlo por falta de oportunidades. Nuria decidió darse esa oportunidad y en las horas muertas fue plasmando en un guión esa idea que le bullía en la cabeza: un original vídeo-currículum en el que aprovechar sus destrezas como repostera para ‘vender’ sus virtudes como maestra.

Con la estimable ayuda de su pareja, cámara de profesión, Nuria ha cocinado un vídeo donde, a partir de la elaboración de esas galletas que tan bien le salen, desgrana sus valores como maestra, que son también los que presiden su día a día. El cortometraje, de poco más de cinco minutos, apenas lleva una semana circulando en Youtube y en las redes sociales y ya ha sido visto por 35.000 personas. En la película, en la que solo se ven las manos de Nuria, nunca su cara, lo que ha dado alas a algún comentario malévolo, la joven profesora muestra deliciosamente el proceso de creación de sus cookies, desde la preparación de la masa hasta el decorado final de una galleta con forma de jardinera.

En esa cadencia de imágenes van apareciendo palabras y frases en catalán como responsable, emprendedora, trabajo en equipo, constancia, paciencia, esfuerzo, creatividad, detallista, experiencia… que resumen la filosofía de vida de Nuria como maestra y como persona. “El proceso de cocinar esas galletas”, explica, “refleja muy bien la forma en la que trabajo con mis alumnos, y creo que también dice mucho de como soy yo”. El vídeo de Nuria es, además, un ejemplo de confianza en sí misma, de espíritu de lucha y de capacidad de trabajo. Quizá por eso el número de visionados de este ‘cookie-currículum’ crece vertiginosamente.

Eco mediático

A Nuria le han llamado decenas de medios de comunicación para interesarse por esta sugerente idea de mezclar con imágenes y música la elaboración de postres con la confección de un currículum. Cuando se hizo esta entrevista, venía de una maratoniana jornada por radios, televisiones y periódicos catalanes. A todos les explica que ella y su pareja han sacado tiempo de debajo de las piedras (“con dos hijos es complicado”) para completar las cerca de 40 horas que ha precisado el proyecto hasta su resultado final.

“Llaman muchos medios, pero pocos colegios”, admite sin que suene a lamento. El esfuerzo no ha caído en saco roto y un colegio ya ha contactado con ella para una entrevista de trabajo, lo que le da esperanzas. Lo mejor, sin embargo, ha sido descubrir, gracias a esa magia que tejen las redes sociales, a un montón de ex alumnos, y a otras muchas personas desconocidas que, impresionados por lo que han visto, no dejan de animarle, de decirle que la admiran sin conocerla y de lanzarle mensajes cargados de optimismo. “Algunos me han emocionado”, dice al otro del teléfono con la voz entrecortada.

-Cuente, cuente, le insisto­

-Me ha llamado un abuelo y me ha dicho ‘ojalá mis nietos encuentren una profesora como usted’. Me ha llamado un padre que me ha pedido que si encuentro trabajo en un colegio le diga cuál es para llevar a sus hijos. Y también ha habido que me ha pedido que le enseñe a hacer galletas, jajajaja.